
La cantidad de casos positivos en la ciudad alarma a muchos, preocupa a otros tantos y, por desgracia, parece serle indiferente a un elevado número de personas. Estremece ver cada día la cantidad de nuevos casos positivos que el país reporta, y más aún, el incremento en la cantidad de casos graves.
De nada vale que el Gobierno y el personal de Salud Pública se desgasten en una labor sin cuartel contra la COVID-19 si a última hora, hay quienes violan todo lo establecido, contrayendo así la enfermedad y lo que es peor, diseminándola.
En los últimos días he visto a personas tomando ron a "pico" de una misma botella en medio de la vía pública, otros caminado por las aceras como si tal cosa, con el nasobuco como babero mientras van "disfrutando" de una cerveza en un camino incierto que bien pudiera terminar en una sala de terapia intensiva, o peor aún.
Y ni qué decir de las colas para comprar el pan u otro producto de primera necesidad donde en numerosas oportunidades el distanciamiento no existe, o solo se puede apreciar en el inicio de la fila.
Soy de quienes piensa que educar siempre es mejor que castigar, que las personas merecen una segunda oportunidad, pero todo tiene un límite. Bastante se ha alertado ya a las personas sobre la peligrosidad de esta enfermedad que ha puesto al país en tensión. Entonces, creo ha llegado el momento de apretar clavijas con quienes hacen caso omiso a lo estipulado para este tiempo de pandemia.
Vea además:
ESTOY DE ACUERDO CON TODO LO PLANTEADO !!!!!.... SOY DE CENTRO HABANA Y LAS INDISCIPLINAS LAS VEMOS DESDE QUE NOS LEVANTAMOS HASTA HORAS DE LA MADRUGADA....
Si....hay que exigir a todas las partes. Y se han cometido errores estratégicos. De un sept cerrado....al pico tiempo se abrieron los aeropuertos sin exigir PCR, se abrieron todas las actividades gastronómicas y culturales, se puso a Durán una vez a la semana, se convocaba a actividades públicas masivas y no se limitaron las celebraciones de fin de año. A nivel comunitario no ha habido buen control de los viajeros. Entonces no es justo depositar en la población y sus indiciplinas las culpas. La rutina doméstica y económica además en crisis. Hay que salir y dedicar horas al pan nuestro de cada dia
No me hables de educar porque en cuba se les habla mucho a las personas de como comportarse. Problema es que no respetan. He visto personas que han llegado de miami y no han respetado la cuarentena y han hecho fiestas con sus familia y las familias los apollan pero la cosa mas bonita que cuando cuba se pone dura con las personas enseguida Hablan mal de la revolucion. No quieren respetar a los policias
Hasta cuándo los llamados. Hay que actuar con mayor exigencia. Los llamados de conciencia no dan resultados. Hay que dar golpes bien fuertes
Es muy fácil echarle la culpa al pueblo. Pero el relajamiento de la disciplina partió de las propias autoridades tanto en el rebrote de las vacaciones cómo en fin de año. Desmontaron todas las medidas que habían tenido resultado cómo si ya no hubiese pandemia, apelaron a la disciplina individual desconociendo por completo la idiosincrasia del cubano. Autoridades, periodistas y personalidades se vieron sin nasobuco, sin distanciamiento tanto por la televisión cómo en espacios públicos. Cuántas veces hemos pedido que se haga una distribución más justa de los productos sin subsidios utilizando, las bodegas, carnicerías, asociando bodegas a tiendas. Ahora para colmo dicen que el aseo se quita de las bodegas y vuelve a los MAI. Es como si no les importara el trabajo que pasa el pueblo todos los días.