Ante la ausencia de la información oficial o de actualizaciones, cuánto agradecemos saber por qué es escasa o va a faltar el agua potable, por qué no hemos recibido el arroz de la canasta básica que hace una semana llegó al mercado cercano, qué hechos extraordinarios merecen nuestra atención o, simplemente, la convocatoria para una actividad recreativa con los más pequeños; para rellenar con piedras y apisonar el hueco que pide a gritos no ser la causa de un accidente, o usar una liga para eliminar un salidero.
No pido abstraernos de la realidad, sino quitar obstáculos para variar el entorno, en un escenario económico sumamente difícil, que impidió efectuar en el primer trimestre de este año el primer proceso de rendición de cuentas de los delegados a las asambleas municipales del Poder Popular a sus electores, en el xviii mandato.
Para suplirlo, hasta tanto se realice, al menos para mí está muy clara la orientación del Consejo de Estado en la nota anunciadora, de que los delegados “cuya actividad laboral lo permita, y de conjunto con las organizaciones políticas, de masas y sociales, incrementen su vínculo y atención permanente con sus electores”.
A su vez, “Los presidentes de las asambleas municipales adoptarán (…) las medidas necesarias para mantener un control y análisis sistemáticos sobre la gestión de las administraciones locales, en medio de las actuales limitaciones de recursos, en la atención y solución a los planteamientos, quejas y peticiones de la población”.
Entonces, no hay que esperar a la reunión, menos a que los problemas sigan acumulándose y continuar como espectadores, muy críticos, cuando juntos podemos hacer algo, con el delegado como ineludible agitador e importante eslabón en un sistema de gobierno municipal del que se tiene toda la teoría y numerosos retos para generalizar las prácticas exitosas.
Ver además:
Su criterio como periodista es uno, lo respeto. Pero en las condiciones actuales muy pocos delegados de circunscripción, pueden pararse ante sus electores, si es que alguien acude a su convocatoria, para explicar algo. Ver para creer.