Nadie es profeta en su tierra, salvo cuando los destinos de la Patria se construyen desde la unidad que defiende su pueblo. Entonces ninguna batalla deja de ser un motivo para la victoria, ni siquiera en la pelota,
el deporte que llena de orgullo como pasatiempo nacional y por estos días, precisamente este domingo, millones de corazones vibran en todo el archipiélago en ese deseo compartido de victoria que lleva por derecho propio el nombre de #TeamAsere.
Y como nada resulta ajeno en medio de un escenario de contiendas en el cual varias generaciones de cubanos han resistido y padecido el criminal bloqueo impuesto por el Gobierno de Estados Unidos, no queda
otra que levantarnos, entre todos, defender el destino de la Patria y saltar los obstáculos que nos colocan para madurar la fruta en medio de las carencias de recursos de todo tipo debido a la aplicación de 243 medidas adicionales e injerencistas que han globalizado la criminal política de Washington contra el pueblo de Cuba.
Vamos a votar por todos, sí. Lo haremos convencidos los millones que no deseamos ni anexión, ni claudicaciones después de haber recorrido un camino de soberanía e independencia, pleno de derechos constitucionales y, por supuesto, libre de pensamientos anexionistas que recuerdan las graves consecuencias de los errores que conducen a bajar la cabeza, hincarse de rodillas y aceptar la derrota frente a un enemigo, el imperialismo norteamericano, que no cejó un momento en su propósito, arreciendo su política agresiva en medio de condiciones de pandemia (covid-19), apostando por ver un escenario de millones de ciudadanos
muertos, en medio del caos, la desesperación y la ingobernabilidad.
Crecimos juntos. Los científicos salvaron el país con cinco candidatos vacunales, tres de ellos convertidos en
vacunas.
Fue el ingenio de profesionales graduados en nuestras universidades quienes lograron construir ventiladores
pulmonares que hoy exhiben altas prestaciones tecnológicas.
Nadie nos quitará el derecho a construir nuestro futuro como nación. Mucho menos hará que olvidemos
nuestras raíces y la historia llena de ejemplos de voluntad y sacrificio. Votaremos Sí por todos, con el orgullo
que cantamos cuando el canto de la Patria es nuestro canto.
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