
Hoy pude comprar el pollo en la tienda mucho mejor que en otra ocasión. Pero feliz con la buena nueva de que las tiendas estarán vinculadas a las bodegas de cada circunscripción.
El pueblo trabajador lo pedía, como así está establecido en las provincias, y ya en la capital vamos a tener esa nueva forma para alivio sobre todo de los que trabajamos y los ancianos.
Con esta medida ya no habrá más coleros, pues equitativamente vamos a adquirir lo que nos asignen, lo que nos corresponde y que ninguna persona inescrupulosa nos lo quite.
Se les acabó el negocio de pedir precios excesivos por un producto que en la tienda les costaba mucho menos de lo que luego lo venden.
A los que no les gusta esta forma de adquirir los productos es por algo y no hay que decirlo. Ya está explicado anteriormente. Pude comprobar que la opinión de la población en cuanto a la nueva forma de compra es bien recibida.
(Tomado del perfil de facebook de Estela Hernádez Rodríguez)
Vea también:

![[impreso]](/file/ultimo/ultimaedicion.jpg?1761501024)
Pienso q aún se deben tomar medidas más fuerte con los dependientes y el personal que controla la cola, aún ellos mantienen el negocio. Por lo menos dónde yo compro que es en Aranguren y Panchito Gómez Cerrro
Él pueblo pidió en la bodega donde compran
No le encuentro la NOVEDAD, ahora estamos en las mismas o peor, a mi bodega le toca comprar en la TRD de Linea entre Paseo y 2 generalmente muy mal surtida y desde que comenzó este nuevo ¨EXPERIMENTO¨ no ha llegado nada a la tienda, y eso que se encuentra al lado de la sucursal de TRD, los trabajadores tendremos que seguir comprando a sobrepecio los productos de primera necesidad a los bandoleros que se aprovechan de estas medidas que generan mas descontrol y me pregunto SÍ EXISTEN LAS BODEGAS Y CARNICERIAS NO DEBERIAN UTILIZARLAS EN ESTOS MOMENTOS DE TANTA PRECARIDAD?, ESTAMOS AGOTADOS, PARA QUE CREAR MAS DESCONTENTO E INEQUIDAD POR FAVOR.
Creo q en algunos lugares debe revisarse la decisión, Ej. En el reparto Barbosa, del municipio Playa, donde hay dos bodegas, una con más de 600 clientes y otra con alrededor de 260, está última es la que puede comprar en el Cupet de 244 y la otra, la mayor tiene que comprar en el kiosco de Cimex del reparto, que es mal abastecido, pues siempre no hay lo mismo que se vende en el Cupet, en el caso del pollo y el aceite, nunca se puede comprar en el mes. Claro si el administrador del Cupet, tuviera un encargo estatal de abastecer lo que le corresponde a este kiosco, otro gallo cantaría. Analicen que no hay lógica.
Si la distribución por tiendas fuera equitativa y a todas llegarán todos y cada uno de los productos, ya sea de 1ra, 2da o 3ra necesidad, sería maravilloso, pero todos sabemos que no es así. Existen municipios, que no gozan de la suerte que tienen otros bien abastecidos como Playa y el Vedado. Yo misma por ponerme de ejemplo con un bebé de 18 meses a penas he podido comprar en la tienda de mi reparto San Agustín, productos tan necesarios como los culeros desechables, las toallitas húmedas, el yogurt o las compotas, por no hablar de los más básicos que para todos son el pollo, el aceite o el detergente. Considero que se debe mirar con ojo bien crítico esta medida y si realmente ha sido certera su implementación para la mayoría. Todos somos cubanos y deberíamos tener los mismos derechos...