Desde hace ya algunos sábados se ha vuelto habitual un personaje irreverente dentro de su realidad absurda, suscitando desde la risa, polémica e interrogantes, poniendo como referente a la comunidad televisiva. ¿Quién será el locutor o locutora que inspiró la inédita personalidad de Noelia Bermellón? Nos queda claro que su tono sobreactuado, imagen cargada y carácter necio, con seguridad, alude a no pocos, pero eso no es lo más importante.
La hora de Noelia nos presenta un acercamiento al humor y la comedia con nuevas perspectivas. Esta propuesta, dirigida por Mónica Crespo con guion de Osvaldo Doimeadiós, fija su mirada a un tema poco
trabajado en nuestros medios y es justamente las formas de hacer para muchos productos televisivos en nuestro país. Sin duda, una crítica hilarante a la que necesitamos poner más atención para alcanzar la excelencia que se necesita en los tiempos actuales, si de atrapar la atención de los públicos contemporáneos se trata.
Andrea dibuja, con toda intención, su “bermellónico” rol superficial, narcisista e ilógico sin hacer concesiones comerciales, pero que, poco a poco, acerca nuevos adeptos, incluso a quienes no entendían
en sus principios. Otro de los aciertos del programa es la construcción de un espacio con nuevos personajes que destacan cada uno en su momento. También se nota el crecimiento y determinación por absorber los criterios del público, volviéndose un espectáculo en proceso que evoluciona y madura con el tiempo.
Estudio de un entorno, profundidad y buen humor llegan cada sábado a La hora de Noelia. Introduciendo en nuestra televisión estilos como el Stand Up Comedy, desde la locura de la imberbe presentadora, quién, además de regalarnos su delicioso vocabulario, alegra el fin de semana.
Otras informaciones:
una critica muy inteligente, desde una posición humorística, a la banalidad e incompetencia que tanto abunda en los comunicadores de distintas latitudes, que quiren "dormir" al público con un lenguaje rebuscado que en realidad no dominan.
Pues para eso es la crítica, para emitir el criterio de quien la hace, puede gustarnos o no, creer en ella o no. Igual que con el programa a unos le gustan y a otro no. En mi familia a todos nos gusta, me encanta la verborrea disparatada de Noelia..
No entiendo, como el país atraviesa una crisis y dicen q no hay presupuesto para ciertas cosas y deciden gastar dinero en un programa como ese. Propongo q se eliminé el programa y el dinero sea asignado a la lucha contra la covid.
Por favor con todo respeto alguien en el ICRT se acuerda del significado de la palabra “humor” Dios mío es insultante que sigan poniendo ese programa tan insoportable
Realmente el programa es malísimo Es tremendo pujo Decepcionante el guión de doimeadios Basta de oír que es un humor refrescante y culto No nos llamemos engaño Y no me vengan con ese cuento de qué el guión es magnífico Humor culto y humor de verdad con talento el de les Luthiers por ejemplo Que lejos está este programa de Noelia de ser humorístico Es difícil catalogarlo porque no sé cómo aprobaron su salida al aire Que les hizo pensar eso?