En lo que va de mes, la Dirección Integral de Supervisión y Control (DISC) de La Habana, conjuntamente con los supervisores territoriales, han ejecutado comprobaciones sorpresivas a más de 137 panaderías de las Unidades Básicas de la Industria Alimentaria (UBIA) de los municipios de San Miguel del Padrón, Cotorro, Plaza de la Revolución, Diez de Octubre, Arroyo Naranjo, Cerro, Guanabacoa, Regla, Marianao, La Habana Vieja y La Habana del Este.

"Hemos comprobado que en dichos establecimientos se violan los precios y normas y se incumplen las medidas sanitarias", dijo Osvaldo Rivalta Torres, director provincial de la DISC en la capital.
Trascendió en el referido periodo, la aplicación de más de 321 multas por el Decreto Ley 30, con cuantías de 8 000 pesos, seis decomisos de productos sin respaldo documental como harina, azúcar cruda y refinada, además de faltantes en los almacenes de materias primas.
"En todos los casos hemos solicitado medidas disciplinarias para los infractores", enfatizó Rivalta Torres.

Como parte del enfrentamiento a las violaciones e ilegalidades, los supervisores provinciales, en el mercado de calle 23 y C, en el municipio de Plaza de la Revolución, comprobaron retención de sal, mientras en el arqueo de la caja se descubrió un sobrante de 137.00 pesos y en una mochila, en el almacén, 50 libras de azúcar cruda. Los infractores fueron notificados con 8 000 pesos de multa.

Asimismo, en el Silvain de Guanabo, en el municipio de La Habana del Este, se pudo detectar violaciones de precio en el rollito que comercializaba a seis pesos y su precio oficial es dos pesos. También la producción no autorizada de masareal y sobrantes de pan sin respaldo documental.


Por otra parte, en Plaza Cerro se comprobaron infracciones en los precios y normas, así como un faltante de 528 963.40 pesos. A ocho violadores del Decreto Ley 30 se les notificó con multas de 8 000 pesos y se le solicitó a la Empresa de Acopio medidas disciplinarias.


En Centro Habana, los supervisores de ese municipio detectaron una venta de garaje sin la correspondiente autorización, además de los precios abusivos y especulativos. Se realizó una venta forzada de los mismos y los infractores fueron multados.


La Habana cierra filas a las violaciones e ilegalidades, a los precios abusivos y especulativos, como una contribución a la adecuada implementación de la Tarea Ordenamiento.
Otras informaciones:
Sin avisar, lléguense por la panadería sita en Jorge y San Miguel, en El Sevillano, les recomiendo, si son cardiópatas no vengan, pero si no padecen del corazón comenzarán a padecer, en fin, hagan lo que siempre han hecho, NO VENGAN y háganse los que no vieron nada, saludos.....
Ojala cerrarantes filas como dicen...jajajaj...esas filas están llenas de huecos por donde se escapan los infractores. Vayan a la panadería La Candeal en San lazaro y Hospital en Centro Habana...Para que vean la asquerocidad que ahí allí, como comen delante del público, cogen el pan con la mano, y con esa misma cobra...eso da asco...Y eso no lo ve ningún inspector...lavan los tanques de preparar la masa en la calle...Pero ya descubrí y doy fe de ello que el covid no se pega por el pan..Esta tan malo que se muere cuando toca esa superficie...
En esas panaderías mi amiga Teresita los administradores lo que hacen es lo mismo que han hecho siempre ROBAR, azucar, arina, huevo, aceite, levadura...Todos esos productos son de alta demanda y altos precios y así se llenan los bolsillo y con ese dinero pagan las multas y sobornan a los inspectores...Porque como ellos dicen la vida esta muy dura y hay que luchar.
Recuerden amigos que el pan y su calidad figuran en las agendas desde los origenes de las Asambeas del Poder Popular en nuestro país. Desde otras épocas venimos bailado, entonamos o escuchamos la canción de los "Van Van" reclamando...."que simplemente quiere un pan"... De ahí hasta la fecha si alguien puede añadir algo que aporte a una solución, que no lo diga, la ponga en práctica. De otra parte los temas relacionados del robo, faltantes de ingredientes, y sobrantes de otras cosas peores vinculadas a ese oficio no esclarecen ni aportan mucho. Debemos reconocer que son varias las realidades que se argumentan, una de ellas, la más objetiva y aplastante es que en Cuba no se cultiva el trigo, ni otros cereales más acostumbrados para elaborar masas para este alimento. Tanntos años y a ninguno de los poderes "consolidados del pan y la harina se le ha ocurrido estimular nuevas ofertas paralelas, ofertas, que no sustituyan el sacro pan, sino que se sumen a él con nuestras producciones de materias primas, Una de ellas el maíz. Bueno, para que seguir, los voy a consar con el tema. Un último intento: si nuestros rectores de panaderos no saben hacer un pan, experimentemos y entreguemos licencia a empresas de países dispuestos a romper el bloqueo yanqui para que aporten tecnología, materia prima y el "saber como" de hacer pan sin faltantes. Lo siento de nuevo este tema nos lleva a pensar barbaridades en alta voz, ya que de inmediato surge la autocensura y traba financiera: ¿con qué le pagamos la parte de la inversión al socio extranjero?. Aceptaria el chavito, aceptarian otro servicio a cambio. Eso no lo saben ni nuestros expertos. Gracias.
Muy bueno cerrarle el paso a las ilegalidades. Si es posible trasladen a los compañeros mis felicitaciones y el deseo de que realicen esa inspección en mi barrio. Alturas de Belén Marianao.