Soy novelero, ¿vieron cómo esta mujer resolvió las trampas con el chofer?
Con decencia, con humanidad, con humildad, con la ternura.
Ese es uno de los asuntos pendientes que tenemos, la falta de decencia que parte de la casa, y nuestro presidente ha mencionado tantas veces.
Con decencia no espantaremos la inflación y los altos precios, pero el decente no roba, no abusa ni atiende mal al otro.
La decencia está dañada en nuestra sociedad, herida y para terapia.
El indecente no puede dirigir porque grita, no analiza, odia y guarda rencores, cree que se las sabe todas y es imponente, logra todo por el miedo y no por el convencimiento a sus subordinados.
El indecente sabe tapar sus errores y hasta logra sobornar y salir ileso de los más terribles delitos, tiende a ir armando círculos de defensa con los indecentes que lo rodean y cuidan por el interés personal olvidando la función social del dirigente.
No importa si es negro o blanco, el indecente flota, increíblemente flota y hasta algunos lo creen bueno.
Todo lo social en el socialismo debe ser decente, sin eso, seguirán las preguntas como en la Mesa redonda del transporte ante el micrófono:
¿Digo la verdad o echo mentiras?
Cada uno tendrá muchos ejemplos de indecencia que lo rodea y es una pena, después es más difícil lograr el rescate de esos detalles que fortalece desde la casa hasta la empresa.
Es tan útil que debiera averiguarse antes de poner a un cuadro por militancias, títulos o colores, como se hace últimamente en muchos lugares, violando la tan violada política de cuadros.
Es para pensar, mientras seguimos mirando la novela diaria nuestra, que continúa tendiendo a la indecencia, debilitando a la gente y a la patria y queda, junto a la humildad, como ASUNTOS PENDIENTES.
(Tomado del perfil en Facebook de Jesús García)
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Estamos en una etapa donde la supervivencia arrasa con la desencia y hasta el más marcado por la educación de la casa hay veces se le va y se impone para sobrevivir, no debiera ser pero es y no viene de ahora no se si la rectificación de errores y tendencias negativas fue un darse cuenta q empezaba a faltar, hace unos días pusieron un documental de Colina de los 80 y es como si fuera de ayer. La indisciplina q se recibe como indecencia ya nos viene de atrás hay q ayudar a quien quiere eliminarla como un Quijote.Todos tenemos que cambiar y cuando digo todos es una revolución dentro de la revolución Todos para mejor
A mi entender la situación más compleja es la desviación del comportamiento de los cubanos, situación obligada por el escenario de Cuba. Será muy difícil cambiar el comportamiento del cubano. Lo ideal es muy difícil de lograr en la vida real
Desde hace tiempo, quizás 10 años o más se ha perdido la decencia en todo los lugares, con la escases esto se pone peor, también se van creando grupos de actuar mafioso y solo le importa sus intereses utilizando mucho el juego de palabras y lo menos que importa es el bien, tiene que haber orden, el orden en todo es fundamental.
- Se educa con el ejemplo. - Hacer es la mejor manera de decir. - Se piensa, cómo se vive. - No hagas, lo que no te gusta que te hagan. - No pidas a los demás que vivan, diferente a como vives.
"...Ese es uno de los asuntos pendientes que tenemos, la falta de decencia que parte de la casa (...) Totalmente de acuerdo y, esto no viene de ahora. Está pasando hace años ya. Fuí dirigente de un Órgano Central del Estado y tuve un jefe inmediato que llegó a cubrir por el que teníamos pq se trasladó y, con muy buenos modales, carismático y aparentemente sensitivo en menos de un año acabó con todo un trabajo bien engranado, dónde a pesar que en ocasiones no teníamos los recursos para cumplir algunas tareas, todo el colectivo se unía y cada cual aportando algo( muchas veces de la casa) la tarea salía y MUY BIEN, porque se hacía con corazón. Este hombre llegó (con su equipo), y comenzó el relajo empezando pq le gustaba darse sus buenos tragos y......no hace falta decir más: antes del año aquella Dirección con sus Departamentos no era ni el polvo y a las personas como yo nos tacharon de locas y nos hicieron la vida bien difícil. Lo que ha pasado Rebeca hasta ahora con el trabajo, se queda chiquito con todo lo que tuvimos que pasar. Y como nosotras/os ha habido y hay muchos, y en estos momentos es lo que impera. Así que: Asuntos Pendientes? Sí