Hablar de la renovación dentro de las filas de Industriales es un tema muy complejo. Prescindir de figuras que durante tantos años han representado al equipo es un acto temerario donde la dirección corre el riesgo de perder popularidad y apoyo dentro de la fanaticada como ha ocurrido en esta ocasión.
Para los aficionados es difícil y doloroso aceptar que de un plumazo algunos de sus ídolos ya no estarán más en el terreno de juego y no se resignarán tan fácil porque ellos fueron parte de sus vidas y llenaron vacíos con sus batazos o sus jugadas espectaculares.
El despido de Frank Camilo Morejón y Yoandry Urgellés y de otros más que conoceremos en los próximos días, sumado a la salida por voluntad propia del capitán Stayler Hernández, ha estremecido a todos y nos ha envuelto en un manto de nostalgias al ver partir por la puerta trasera a los últimos guerreros que alguna vez le dieron un título de campeones a la capital de todos los cubanos.
El grupo de trabajo que lleva a cabo esta estrategia ha expuesto sus razones en conferencia de prensa con los medios provinciales, pero deben comprender que ellas, por muy lógicas que a alguien le pudiera parecer, no es una música agradable a los odios de los mismos atletas y de nosotros, los que amamos este deporte a causa de las acciones deportivas que ellos mismos hicieron a lo largo de estos años.
No conocemos las interioridades de un equipo de béisbol donde convergen múltiples personalidades con características diferentes y con distintos ángulos de ver la vida y el deporte mismo. Solo sabemos -aunque se equivoquen como todos- que la dirección de un conjunto hace lo posible siempre por alcanzar victorias porque además de cumplir una misión está en juego su propio prestigio y la calidad de su trabajo.
Es ahora el momento de llorar por la partida de esos que siempre se entregaron sin reparar en riesgos y que tantas veces nos levantaron de nuestros asientos con sus habilidades, los que se sacrificaron todos los días de una temporada larga alejados de su familia para que nosotros desatáramos nuestras pasiones y disfrutáramos de este maravilloso juego que es parte intangible de nuestra cultura nacional.
Pero también es el momento de unirnos como aficionados y dejar que los directivos provinciales hilvanen sus estrategias y demuestren sobre la grama la efectividad de su proceso de renovación en busca de una corona que nos ha sido esquiva durante 11 largas campañas.
Saquemos nuestras frustraciones para que se oreen, hablemos de posibles injusticias, de tristezas, y de dolor profundo por los que ya no estarán; pero Industriales es mucho más que eso, es un modo de vida del cual no podemos prescindir y necesita de nuestro apoyo para la venidera Serie Nacional. La renovación no es el fin y puede ser un punto de partida. Nos vemos en el estadio.
Vea también:
![[impreso]](/file/ultimo/ultimaedicion.jpg?1757762129)
Boris como siempre tus comentarios son mas que acertados acertadicimos aunque nos duelan creo siempre un retiro a traido esto ,lo que pasa que esta vez no fue uno son 3 y se que abra mas pero el que mas roncha va a levantar es camilo porque creo que podia un año mas sus conocimientos y disposición nos hacia falta este año y mas cuando oscarito calse los arreos (debe ser el sustituto )o algun pitcher no les sera lo mismo mirar hacia el banco y ver a un camilo dandolo apoyo un consejo como hasta ahora en un momento dificil
Y si esa dirección no lo demuestra? Ya el daño esta hecho. No es un problema de estrategias. Es un problema de forma. De respeto al atleta y a la afición. Quizás es que esta última ya no sea tan importante para esa dirección. Si había que hacer renovación, ok estamos de acuerdo. Empecemos por la dirección del equipo que no supo guiar la nave azul. Si la causa fueron algunos atletas, ok díganlo con franqueza.
Puede q sea momento d establecer nuevas acciones pero el respeto se gana respetando. No creo q fuera necesario prescindir d Frank Camilo Morejón, podía seguir jugando alternando con Oscar Valdés q m parece es el único q puede hacer un buen papel aunque le queda mucho camino por recorrer todavía. De ese modo al darle más participación en los juegos ganaría en experiencia, arrojo, maña y x otro lado FCM podría ser catcher cerrador, ayudar en el pitcheo q ése es nuestro verdadero dolor d cabeza sin necesidad d lesionarse tanto y sin necesidad d tratarlo como un jugador desechable después d tanto aportar al equipo. Además, sus números en los 2 últimos años están bien en los parámetros correspondientes, o sea, q no se justifica una salida así. Hay problemas más urgentes q resolver en Industriales q la expulsión del mejor catcher q ha tenido en la última década. Ha alternado con otros q ni siquiera se le han parecido en la experticia d esta complicada posición d defensa, por lo q es muy claro q despedirlo no es la más sensata d las decisiones. Desgraciadamente, debido a las lesiones sufridas no podría aspirar a un retiro pasado los 40 como recientemente ocurrió con Tabares y Mayeta, así q era cuestión d poco tiempo p esperar por el objetivo de q no estuviera más pero también de respetar y reconocer lo grande q es y como tal merecía un mejor trato x parte d las autoridades pertinentes.
Yo creo que los directivos nacionales han hilvanado en muchas ocasiones sus hilos y no en pocas ocasiones han sido erradas, a fin de cuentas son personas iguales a nosotros y sus desición también pueden estar equivocadas, no son dioses ni sabios y los intereses de ellos en muchas ocasiones no responden a los de un seguidor o un aficionado pues el aficionado lo ve con pasión y amor nada más mientras que la directiva tiene otras aristas que muchas veces nada tienen que ver con el deporte. Al final el deporte es un juego y es para divertirse y no para hacer política. Es mi opinión. Yo voto porque Frank Camilo siga en Industriales.
Las direcciones de Industriales se suceden una tras otra, desde hace varios años com más desaciertos que dianas logradas. No se me hace justo, ni con el propio atleta que ha entregado su vida a este equipo (y singularizo respetuosamente los nombres ya conocidos, y los de otros ¨que vendrán¨, como dice el periodista); una de las cosas más lamentables es el secretismo y la falta de claridad ante la fanaticada, que es precisamente quien a lo largo de los años ha defendido y apoyado sin reservas a Industriales. A PESAR de direcciones, cuerpos técnicos y otros decisores que más de una vez han destruido a los azules y su fanaticada. Sencillamente me parece más de lo mismo, es como si se reestructure una especie de piña ultrasecreta... Disculpe periodista, quizás este comentario no lo publiquen, se que corro ese riesgo... Pero debo decir que a las frustraciones no les bastará un oreo al viento a costa de los seguidores, más aún cuando los trapos sucios los guarda alguien por ahi. No se si le parecera bien a usted convertirse en partícipe de esto, pero no me lo parece...