¿Se puede usar friísimo como superlativo de frío?
Esto es lo que dice la Real Academia Española (rae):

En el español siempre tenemos mucho por aprender, esto se debe a que nuestra lengua es amplia con muchas normas que respetar. Los superlativos vienen siendo por mucho tiempo el dolor de cabeza de los hablantes, pues no hay un solo tipo de estos, sino que incluyen superlativos regulares e irregulares.

De acuerdo con la rae friísimo como superlativo de frío es perfectamente válido, y es de hecho, la
forma más frecuente. También se puede usar frigidísimo.

Como indica el Diccionario panhispánico de dudas, –ísimo -ma es un sufi jo de origen latino que se une a adjetivos califi cativos y a algunos adverbios para formar el superlativo: malísimo, blanquísimo,
cerquísima. Excepcionalmente se une a algunos sustantivos, con intención ponderativa: campeonísimo.

Combinado con -ble da lugar a la terminación -bilísimo: amabilísimo, confortabilísimo…

Aunque, en general, el español suele preferir, la formación del superlativo absoluto mediante la
anteposición del adverbio muy al adjetivo en grado positivo (muy malo, muy blanco, muy cerca) muchos adjetivos admiten también la adición del sufi jo –ísimo de acuerdo con sus reglas morfológicas.

Se debe tener en claro que la mayoría de los adjetivos tienen superlativos regulares con el sufi jo
isimo. Ejemplos: sueltísimo de suelto, revueltísimo de revuelto, cuerdísimo de cuerdo. Por otra parte,
están los superlativos irregulares son las excepciones. Ejemplos: fortísimo, novísimo, bonísimo.

Algunos adjetivos admiten dos formas superlativas diferentes. Ejemplo: fuerte, el cual como superlativo regular de uso popular puede ser fuertísimo, y fortísimo como superlativo irregular, según indica el Diccionario académico.

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