Continuamos con otro de los llamados verbos asesinos, conocidos también como verbos comodines:

Iniciar: Se trata de un verbo que no usamos normalmente en el lenguaje hablado. Sin embargo, es
corriente que leamos frases como se iniciará el curso o el inicio del curso, en las que todo sería
más normal, si dijéramos se abrirá (o empezará) el curso y la apertura del curso. Vemos también, se ha iniciado un expediente, cuando en castellano lo fácil sería se ha abierto (o incoado) un expediente. Y como parece que el verbo abrir no está de moda, escuchamos, no pocas veces: se inició un turno de preguntas o se inició la sesión, cuando todos esperábamos que ambos se abrieran. Asimismo, se inician conversaciones en lugar de entablarlas.

El consejo es fácil: siempre que tengamos la tentación de utilizar el verbo iniciar, repasemos antes la lista de posibles sustitutos: comenzar, empezar, principiar, inaugurar, abrir, incoar, entablar, emprender, aparecer, surgir, arrancar, salir, desatarse, desencadenarse, nacer, etc.

Ver además:

Verbos asesinos (I)