La Habana es una ciudad de ensueño. Por un lado, el mar sirve de perenne guardián, por el otro, cuenta con edificaciones de diferentes épocas, donde se entremezclan distintos tipos de estilos arquitectónicos. Construcciones nacidas hace siglos, comparten espacios con otras mucho más modernas.
Pero ahí no quedan sus embrujos. Cualquiera que ande por la capital cubana puede apreciar amplias zonas donde el verde del follaje brinda sombra a los caminantes, al tiempo que purifica el aire que se respira. Un ejemplo de ello lo constituye el Parque Ecológico Monte Barreto, situado en el municipio de Playa.
A Damián Hernández Rizo, quien es el administrador general del parque, lo conocimos este 29 de diciembre, fecha en que se inauguró el cánopy allí construido. Él nos comentó que en el parque cuentan con tres ranchones, dos de ellos donde se brindan comida criolla con distintos tipos de arroces. A ello se suma la posibilidad de que los visitantes, en los ranchones Roble Blanco y Tamarindo, puedan hacer las reservas de las comidas que van a consumir, las cuales, en caso de que decidan acampar en el parque, se les lleva al sitio donde ellos se encuentran. El tercer ranchón es el llamado Alegría, destinado a darle servicio de helado a los niños, y algunos tipos de confituras.

La inauguración, este 29 de diciembre, del cánopy instalado en Monte Barreto, constituye un nuevo atractivo de ese parque donde anidan distintas especies de aves, además de ser casa de varias familias de ardillas. La instalación de toda la estructura se realizó en poca más de medio año, tiempo durante el cual se instalaron las diez plataformas y los cinco cables que conforman el recorrido de cerca de 300 metros.
Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Partido en La Habana, conoció que durante el último mes, se han realizado varias pruebas de práctica, las cuales demuestran la seguridad de la obra. En el cable escuela los guías realizaron una demostración de qué se puede y qué no se puede hacer durante el trayecto, explicación que se le da a quienes van a hacer uso del cánopy.

Tras la explicación, tocó el momento de comprobar la calidad de la obra. La profesionalidad de los guías se hizo patente. En cada plataforma la seguridad era lo primero. El viaje entre el verde follaje permite apreciar la naturaleza desde un ángulo diferente al cotidiano. Debajo, con ojos atentos, se sigue de cerca cada tramo del trayecto, el cual, en caso de hacerse completo, tiene un costo de 300 pesos, mientras que si solo se realiza la primera parte, el valor es de 50.
María Álvarez es la jefa de actividades y la encargada de la atención directa al cánopy. Ella nos explica que
quién desee disfrutar de las áreas de Monte Barreto, incluido el cánopy, puede hacerlo de martes a domingo, de 9:00 a.m. a 5:00 p.m. y agrega que en el caso de los niños, siempre harán el trayecto acompañado por un guía, mediante el uso de un arnés especialmente diseñado para ellos.

Antes de la partida, el también Presidente del Consejo de Defensa Provincial llamó a los trabajadores de Monte Barreto a convertirlo en un sitio digno, de gran atractivo, “un lugar donde la naturaleza pase a ser el centro de la vida de las personas, donde todo el que esté aquí, esté en función de la naturaleza, de una recreación sana”.
El buen trato y el ambiente acogedor que existen en Monte Barreto, unido a la calidad de las ofertas que allí brindan, hacen de este espacio, un lugar ideal para pasarla en familia.
Ver además:
300 pesos por el cánopy qué tiene un recorrido menor qué 300 metros. Hasta cuando los precio altos en esté país.
Muy bien para el esparcimiento con la naturaleza pero 300 pesos creo q un poco carito me parece Gracias
300 pesos?!! Es en serio? El de Trinidad es el doble y los paisajes del valle de los ingenios nada q ver con Monte Barreto y cuesta mucho menos. Ojo con los precios q con el del Jardín Botánico hicieron lo mismo. Existen mas números ademas del 300. Buenas tardes
Si va un matrimonio con 2 hijos adolescentes...sólo usar el canopy son 1200 y el consumo del alimento...seguimos igual...hace falta un salario de un mes para un día de paseo. Es una falta de respeto ese precio.
Yo soy un trabajador y no podré nunca montar en canopin 300 pesos el costo está muy caro eso no es para los cubanos creo y si llevo a mi hija y mi mujer 900 pesos tirame de un cable , es un lastima la falta de respeto hacia aquellos que dependen de un salario humilde