
Ante la amenaza de la llegada del huracán Eta, los habaneros salen a la búsqueda del preciado pan. En la entrada de la unidad de Zapata y 12 varias son las opiniones y exigencias de la población. La calidad contra inmediatez es uno de los dilemas aunque en general prima la satisfacción, es el criterio general que sacamos de nuestra visita en dicho centro de referencia.

En esta céntrica esquina desde las 10 de la mañana y hasta altas horas de la noche, con sus intermitencias y colas, pero siempre con un tratamiento agradable, los vecinos, trabajadores de los alrededores y hasta personas de otros municipios llegan buscando culminar su personal odisea del pan.

En el complejo de Zapata y 12, caracterizado principalmente por la venta de dulces y panes, sus trabajadores y directivos trabajan para llevar a la población un servicio de calidad. Aunque el proceso pudiera resultar agobiante, los trabajadores de este centro ponen primero el júbilo y las ganas de hacer cómo ingredientes necesarios.

Según el administrador de la unidad, Ismel Torres, muchas veces las personas no comprenden la demora en la salida de algunos productos que necesitan de tiempo para obtener su calidad máxima. Preguntando a la población que hacía fila fuera del establecimiento, no pocos respondieron que este es uno de los pocos lugares donde se va al seguro para conseguir pan y dulces buenos. Ojalá otras unidades que hoy ofrecen este servicio en la capital repliquen dicha experiencia.
Ver además:
El problema con el pan está desde mucho antes de eta. No se entiende por qué en unas panaderías hay más variedad que en otras.
El artículo está muy bien y todo analizado pero la compra del pan sigue igual de difícil! La única forma q existe en Cuba para merendar y desayunar de las personas!! Gracias por leerme! Saludos!
Que bien es vivir en el vedado, donde por lo general se hacen la mayoria de los reportajes de muy buenos ejemplos que no es lo que caracteriza este y muchos otros servicios en nuestra capital, los invito a otros municipios fuera de la vista de la prensa, como Marianao, donde calidad y cantidad no salen de la mano del pan que consume la poblacion, lleguen de sorpresa pues los "controles sorpresivos" avisados no dan mucho fruto.
Mi criterio no es el mismo a como lo han expresado aquí. En ocasiones he estado a punto de ir a la Empresa del pan.. Al principio todo muy bueno, pero en estos momentos no siempre he salido satisfecha del trato y la oferta. Hace unos días compré el mal llamado pay y cuando llegué a mi casa, estaba hueco por dentro y carecía de la crema que se le pone, y por demás muy duro. Invertí 12 pesos para favorecer al colector de la basura.
La situación con las panaderias no es ahora con Eta, es desde antes, se debería hacer un reportaje más profundo.