La violencia contra mujeres y niñas es una de las violaciones de los derechos humanos más extendidas, persistentes y devastadoras a nivel mundial, sobre las que apenas se informa debido a la impunidad de la cual disfrutan los perpetradores, y el silencio, la estigmatización y la vergüenza que sufren las víctimas.
Los efectos psicológicos adversos de la violencia contra las mujeres y niñas, al igual que las consecuencias negativas para su salud sexual y reproductiva, las afectan en todas las etapas de sus vidas.
Es muy lamentable que en pleno siglo XXI aún existen mujeres y niñas que sufren de disímiles y horribles formas de violencia de género. Por esta causa, cada 25 de noviembre se conmemora el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres y las niñas a fin de sensibilizar sobre esta situación que afecta a millones de mujeres a nivel mundial, esta vez bajo el lema: ¡ÚNETE! Activismo para poner fin a la violencia contra las mujeres y las niñas.
Aunque en todas partes del mundo pueden sufrir violencia de género, algunas mujeres y niñas son particularmente vulnerables, por ejemplo, las mujeres que se identifican como lesbianas, bisexuales, transgénero o intersex; las migrantes y refugiadas; las de pueblos indígenas o minorías étnicas; o mujeres y niñas que viven con el VIH/sida; o con algún tipo de discapacidad; y aquellas en crisis humanitarias.
La violencia hacia las mujeres y las niñas se manifiesta de forma física, sexual y psicológica e incluye:
• Violencia por un compañero sentimental (violencia física, maltrato psicológico, violación conyugal, feminicidio).
• Violencia sexual y acoso (violación, actos sexuales forzados, insinuaciones sexuales no deseadas, abuso sexual infantil, matrimonio forzado, acecho, acoso callejero, acoso cibernético).
• Trata de mujeres y niñas (prostitución, mano de obra forzada, esclavismo o servidumbre)
• Mutilación genital
• Matrimonio infantil, fundamentalmente en África y Asia meridional
Del 25 de noviembre al 10 de diciembre, Día internacional de los Derechos Humanos, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) se une a los gobiernos, la sociedad civil, el sistema de las Naciones Unidas y otros socios para conmemorar los 16 días de activismo contra la violencia de género.

¿Cómo se manifiesta en Cuba?
La Isla fue uno de los primeros países en firmar la Convención Sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer y en ratificarla; la estrategia cubana de desarrollo económico y social ha incluido como un derecho inalienable de las mujeres, participar en la vida económica, política, cultural y social del país, en igualdad de oportunidades y posibilidades que los hombres.
A su vez, la Constitución de la República legitima la igualdad como principio rector de la sociedad y contempla en su legislación un conjunto de disposiciones, las cuales conceden derechos especiales a la mujer tanto en el Derecho Civil, como en el de Familia, en la Legislación Agraria y en materia de empleo y de seguridad social y que las trabajadoras tienen garantizados entre otros, su derecho al empleo, a igual salario por trabajo de igual valor, a la seguridad social, a la licencia de maternidad pre y posnatal, a la protección ante accidentes y enfermedades laborales y comunes.
A pesar de que se aboga por este derecho, Cuba no está exenta de la violencia de género. Su cultura patriarcal arraigada por varias generaciones conlleva a que aún exista una desigualdad reflejada en el ámbito laboral y familiar, donde persisten estereotipos, que mantienen a muchas mujeres en el rol reproductivo, como cuidadoras y administradoras del hogar.
Tampoco existe suficiente percepción del problema, por lo que algunas personas no comprenden la necesidad de visibilizar la violencia de género como un problema social y de salud, que puede provocar depresión, estrés, ansiedad, trastornos del sueño y de la alimentación, entre otros.
Aunque han habido notables avances en el aporte de la mujer en la sociedad cubana, aún se aprecia menor participación de estas en algunos espacios, mayor carga de horas de trabajo en el hogar; predominio femenino en el rol de cuidadoras de menores, personas con discapacidad, enfermos y personas de la tercera edad, las cuales son manifestaciones de discriminación de género.
¿Qué piensas tú? Pinta tu mundo de naranja, y únete a la campaña contra la violencia de género.
Referencia
Sitio web de la ONU
Ver además:
"Violencia de género: Un problema social y de salud" Por suerte en nuestro país existen cada vez más leyes mejoradas de todo tipo para proteger a la mujer y al hombre contra la violencia y la discriminación de cualquier origen: administrativo, social, generacional. Entre estás últimas contra la aplicación e imposición del más fuerte y dotado en colas por la supervivencia. Luchemos contra la actitud inconciente de ver impasibles cuando ante nuestros ojos se ejerce la ley del más fuerte, de ver como sujetos que mayorean se empoderan y aprovechan de cualquier situación cotidiana. Gracias.