El 20 de abril, alrededor de las 10 am, salgo de mi casa con destino a mi trabajo luego de resolver un gran problema doméstico, cuando llego a la calle Línea y 2 en el Vedado trato de coger algún transporte que me lleve a La Habana Vieja, ninguno iba en esa dirección, como a las 10:30 am me para un carro con un chofer que no pasaba los 30 años y me dice que de Línea y 2 hasta el Bar Cabañas (7 km) me cuesta 300 cup, como todos imaginarán le dije NO gracias, alrededor de las 10:45 am pasa un almendrón negro con 4 pasajeros, pregunto para La Habana y el chofer un joven de apenas 20 y pico de años me dice sí, cuando a una cuadra de Galiano, le pedí que me deje donde pueda, para y le pregunto mi niño cuanto te debo y me dice NADA SEÑORA YO NO LE COBRO A LAS PERSONAS MAYORES DE 60 AÑOS, le insistí y se rehusó, me dice señora no es con usted, yo nunca cobro a las personas mayores de 60 años, qué felicidad sentí, le expresé mi satisfacción por encontrar a un joven que respeta y ayuda a sus mayores, le di mil gracias, mi bendición y le desee toda clase de felicidad, prosperidad y sobre todo mucha salud.
No sé su nombre, pero mi pensamiento está proyectado para que el universo le brinde todo lo bueno que se merece, no por no cobrar sino por la ayuda y el respeto a las personas de la 3ra edad.
(Tomado del Facebook de Siri Pérez)
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Que esta bonita experiencia se repita de muchas formas ya que pretendemos igualarnos al mundo pero que el estado nos resuelva todos los problemas y dè todas las soluciones cuando en los demàs paises se recibe màs ayuda de las organizaciones sin fines de lucro y de la comunidad cada uno con lo que pueda aportar.