Creo que esta feria (Feria Agroindustrial Alimentaria FIAGROP 2022) debería ir teniendo también subsedes que como ramas de un árbol, que es la Feria de Boyeros, se vayan extendiendo, y en cada lugar de esta debe lucharse porque sean ejemplo de calidad, compraventa de la población de animales vivos o procesados y de productos agrícolas de todo tipo, incluidos los exóticos como la manzana o la uva, arándanos, quinua; todos al más bajo precio posible en relación con los precios inflacionarios, para que sirva de guía y ejemplo a seguir por los que producen y comercializan alimentos.

Ferias como estas o miniferias deben generalizarse en todo el país como vanguardias de lo que se debe ofertar, de los niveles de conocimiento a que se debe aspirar, que las conviertan en hitos de cultura agrícola y comercializadora de los mejores ejemplos en estos campos e identificadas con la satisfacción de las necesidades del pueblo que es para lo que se trabaja, hasta implantar esto, como costumbre natural, en el pensamiento de que si el pueblo no está satisfecho en sus necesidades de alimentación y tiene en su mesa el plato necesario, mediante la agricultura, entonces, no se ha hecho buen trabajo.

El pueblo es el que debe dar la calificación a estos eventos, quizá esto pueda ser mediante encuestas o pulsos de opinión que se publique a partir de las cifras de participación. Solo así tendrán sentido y hoy más que nunca esto es imprescindible lograrlo, pues, los yanquis esperan que no lo logremos. Miguel

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