Faltan pocas horas para que se inaugure la 65 edición de la Serie del Caribe Gran Caracas 2023 y decidí subir otra vez al balcón de Tribuna para ver cómo estaba el ambiente que rodea a los Agricultores de Carlos Martí, representantes de Cuba en este evento regional.
Alojados en el hotel Marriott Playa Grande-uno de los mejores de Venezuela-los alazanes con hachas se sacudieron el polvo del camino, y esta mañana pudieron recorrer la confortable instalación, ubicada a solo 150 metros de la playa.
Muy tranquilos, disfrutando de la excelente atención y de la espectacular vista al Mar Caribe, comenzaron a visualizar su primer enfrentamiento de este jueves a las 9.30 am contra los muy difíciles Gatos Salvajes de Curazao.
Me siento en perfectas condiciones. En varios playoffs he salido de abridor en el primer partido. Esto es otro reto más como lanzador en mi carrera, espero cumplir las expectativas y ayudar al equipo a lograr la primera victoria que siempre es importante, había declarado César García a su llegada al Aeropuerto Internacional Simón Bolívar.
El designado para abrir ese primer pleito no está preocupado para nada por su última actuación en el tope con el equipo Cuba que participará en el V Clásico Mundial porque eso lo ayudó, según sus propias palabras, a “mentalizarse y enfocarse más en el trabajo”.
Ellos fueron campeones en Holanda y ahora se han reforzado con buenos peloteros. Hay que trabajar fino y trazar una buena estrategia para poder sacar outs y lograr el éxito, dijo al referirse a sus rivales, quienes se presentaron aquí con una nómina donde destacan algunos peloteros activos en Grandes Ligas o con experiencia en ella.
Esta tarde los vi subir a un ómnibus y recorrer menos de 3 kilómetros por la Avenida Principal hasta el mercado Popular Cacique Catia atestado de comerciantes, y entrar en el estadio César Nieves, para realizar el primer entrenamiento antes del partido.
Este equipo es mejor que otros que dirigí a la Serie del Caribe. El pitcheo quizás es lo más preocupante pero creo que pueden hacer el trabajo, había dicho el mentor Martí antes de salir de Cuba.
Con esa filosofía y la confianza que siempre le transmite a su tropa, el avezado técnico de 73 años observó desde el banquillo la rutina diaria, mientras tejía en su mente estrategias antes del primer combate. Nos vemos en el estadio.
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