Las afectaciones derivadas por el azote del huracán Ian al Occidente de Cuba obligaron a los directivos del fútbol en el país a postergar el partido final de la Liga Nacional de Fútbol Sala y la semifinal de la Liga Nacional de Fútbol Femenino.
En el caso del futsal, el tristemente célebre Ian no es el único responsable por el aplazamiento, pues hace poco más de una semana igualmente hubo suspensión; no por fuertes vientos y lluvias, sino por un fenómeno también natural (a juzgar por lo cotidiano que es), cuyo “parte”, nada meteorológico, suele enunciar: “por dificultades con la transportación ha sido suspendido…”.
Después, como todos sabemos, irrumpió Ian. Y, mientras la recuperación para borrar sus malévolas huellas continúa avanzando, en los amantes del dinámico futsal crecen las expectativas por saber cuál de los dos contendientes (Granma o La Habana) levantará el trofeo de campeones en este 2022 en una fecha aún por definir.
Lo mismo sucedió en el fútbol para damas. Aquí sí fue el indeseado meteoro el exclusivo obstáculo. Hizo acto de presencia y “prohibió” dar continuidad a la emocionante competencia entre las muchachas más sobresalientes en el trato al balón a nivel nacional, quienes se disponían a mostrar su virtuosismo en el segmento semifinal de la lid, instancia a la que llegaron las selecciones de Santiago de Cuba, Camagüey, Villa Clara y La Habana.
Sin menospreciar a rivales de turno en uno y otro deporte, en ambas disciplinas son las escuadras habaneras las favoritas para ceñirse la corona, y solo un inesperado giro del destino pudiera favorecer que el color azul no predomine en las celebraciones inmediatas y posteriores al silbatazo final de los dos campeonatos.
Baste recordar que los muchachos del equipo de futsal capitalino ya tienen un pie en lo más alto del podio. El domingo 18 de septiembre, en el partido de ida de esta finalísima demorada, vencieron a los campeones vigentes de Granma, allá en la sala 19 de Mayo, en Jiguaní. Y aunque recibieron cinco goles de la muy eficiente artillería granmense, los jugadores giraldillos llevaron un número mayor a la pizarra, donde quedaron reflejados los siete goles que anidaron en la portería rival.
Y en eso de ser favoritas, las futbolistas habaneras no se quedan atrás. Si bien es cierto que tendrán al elenco de Santiago de Cuba como un adversario difícil de superar en una probable final, los números de las jugadoras nacidas en la mayor urbe cubana durante la fase clasificatoria son imponentes: siete éxitos, un revés, 41 goles a favor y solo dos en contra, constituyen argumentos irrebatibles que confirman la calidad del equipo azul.
Ellos en el futsal y ellas en el fútbol han presentado con solidez sus candidaturas a conquistar el trono en sus respectivos deportes. A simple vista parecen indetenibles. Solo el retraso imprevisto pudiera afectar los vaticinios de la mayoría si por esa causa se perdiera el ritmo mostrado hasta ahora. No obstante, de ello se encargan los altos mandos de los dos seleccionados, que se han tomado muy en serio la tarea de propiciar a sus dirigidos una pausa tan activa como las circunstancias lo requieren.
Ver además:
Harold Lázaro Quintana Figueroa: Dominio del balón y la vida