El deporte en Cuba no solo busca medallas. Fiel a su concepto de ser un derecho del pueblo, es fácil ver interactuando en sus instalaciones, a personas de todas las edades. Más allá de los resultados en el ámbito competitivo, el deporte es también un medio para la mejora de la salud, tanto físico, como psíquica del pueblo, por lo que sus trabajadores pueden verse en los lugares más intrincados de nuestra geografía.

Saber que con la realización de actividades físicas se puede contribuir a aliviar, aunque sea por unas horas, las tensiones que causan eventos extremos, es motivo suficiente para dejar la comodidad del hogar y llegar allí, donde su presencia se hace necesaria. Tras la caída de un rayo en el tanque 52 de la Base de Supertanqueros de Matanzas y el incendio de grandes proporciones que se desató en esa zona, se produjo
la llegada de bomberos, personal de la Cruz Roja Cubana, de otras instituciones, y los principales dirigentes de la provincia y el país a la zona siniestrada, a quienes posteriormente se sumaron bomberos de Venezuela
y México.

Los mensajes de solidaridad del pueblo para con los pobladores de la Atenas de Cuba, entrega de diversas donaciones, no se hicieron esperar. Desde la máxima dirección del INDER, hasta campeones Olímpicos
y Mundiales, expresaron su acompañamiento a los matanceros. De igual forma, han realizado diversas donaciones, entre las que resalta en las redes sociales la hecha por el recordista mundial de salto de
altura, el matancero Javier Sotomayor, a las fuerzas que enfrentan el siniestro en la Base de Supertanqueros de Matanzas.

Mientras, en arduas jornadas de trabajo se luchaba contra las llamas, también se aseguraba la vida de los pobladores, algunos autoalbergados en casas de familiares y amigos, otros, en instalaciones estatales. En imágenes publicadas por el INDER de Matanzas se aprecia la realización de actividades físico-recreativas en el centro de evacuación creado en la Universidad de esa provincia, donde toman parte, de forma activa, los niños.

Estos momentos de esparcimiento contribuyen, tanto al bienestar psíquico de esos pequeños, que han tenido que abandonar sus hogares, como al de sus familiares, que les ven sonreír en medio de tantas tensiones.
Cada acción realizada, desde el combate contra las llamas, así como los mensajes de aliento, las donaciones de sangre, alimentos y de otros tipos, y las actividades físico-recreativas realizadas con los albergados,
constituyen parte de esa batalla por la vida que durante días ha tenido lugar en la Atenas de Cuba.

Otras informaciones:

VII Campeonato Nacional sub 23: Artemisa tomó desquite en el Latino