Este viernes tendrá lugar en la Arena Kokugikan de Tokio unos de los duelos más esperados en el boxeo de estos Juegos Olímpicos, cuando se enfrenten entre cuerdas el cuatro veces titular mundial y campeón olímpico de Río de Janeiro Julio César La Cruz y el también cubano naturalizado español Enmanuel Reyes.
El llamado “Profeta” era un desconocido púgil que emigró de la Isla en 2018 y luego de un largo periplo por algunas tierras recaló en España donde encontró un puesto en la selección nacional de ese país.
Con un palmarés en blanco se ganó el boleto a la cita estival alcanzando una plata en el preolímpico de París 2020 donde salió derrotado en la final en cerrada porfía por el ruso Muslim Gadzhimagomedov, titular de Europa y actual campeón mundial.
En Tokio se ha robado los titulares al protagonizar una de las mayores sorpresas, cuando en octavos de final noqueó al favorito kasajo Vasili Levit, doble medallista en campeonatos mundiales y subtitular olímpico de Río de Janeiro 2016.
Su éxito ha sido empañado por varias lamentables declaraciones que van en contra del llamado Juego Limpio o fair play y del espíritu olímpico, donde se trata siempre de superar a los adversarios desde la base del respeto y las buenas prácticas.
"Vamos a por él. A arrancar cabezas. Me da igual que sea de Cuba. Yo vine a buscar mi oro y el que se ponga encima del ring, se va a caer", dijo al ser cuestionado por su cruce en cuartos de final con el camagüeyano La Cruz.
Con otras frases como "El peligro soy yo" o “Yo soy el tifón que estaban esperando”, este boxeador de 28 años y 1.95 metros de altura no ha parado de “darle a la lengua” desde que puso un pie en la tierra del Sol Naciente y ha sido duramente criticado en varios medios deportivos alrededor del mundo.
Cuando suene el gong este viernes a las 8.00 de la mañana (hora de Cuba), en la esquina roja del encerado estará un Domador que habla con el lenguaje de los puños y que se ha ganado un prestigio en el mundo boxístico por su depurada técnica y sus resultados relevantes, con un currículo extenso y un estilo que, si bien es peligroso para esta división de 91 kg, desestabiliza a sus rivales y le ha traído buenos dividendos en su carrera.
Aunque en un combate a este nivel cualquiera puede triunfar, Julio César La Cruz, la “Sombra” como muchos lo llaman, ya ganó el primer asalto por su ejemplo sobre el ring y el respeto que siempre ha mostrado por sus rivales. El final lo sabremos pronto.
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Por honor y dignidad Julio César La Cruz tiene que salir a no solo vencer a su charlatán de rival, sino a tratar de dar la mayor cantidad de golpes efectivos para callar al mismo y derrotarlo de forma muy convincente
El objetivo es claro, provocar a JC, y ahí es donde debe radicar su mayor defensa, en no dejarse provocar, mantener la ecuanimidad, pelear como siempre pelea, y atacar, atacar y atacar como hizo en su primera pelea. Si se deja provocar y arriesga más de lo debido, lo pueden nockear, el profeta parece que tiene pegada y sabemos q esa es la única debilidad de JC, no es pegador. Por lo tanto, tiene w cuidarse, ganar, y callarlo a piñazo limpio.
Si Julio cesar La Cruz no gana el oro, no otro resultado el ORO, tiene que terminar en el equipo nacional,aqui si ha sido muy poco condescendientes con otros boxeadores de otras epocas con un nivel superior, sin embargo este equipo se mantiene sin resultados positivos , es que no hay boxeadores jovenes que sustuyan a La Cruz, Lazaro Alvarez,Rosniel Iglesias ect,¿hasta cuando hay que aguantarlos?.Cuba necesita una renovacion urgente de su equipo de boxeo
Sandro, amigo soy pinareño, creo que el camsgueyano Kevin Brown también estaba listo para asumir la división de Rosniel Iglesia
A mí me desespera Julio César...ojalá se encuentre a un rival que le haga "Sombra" y que gane el mejor.
Al final, la pelea dará la última palabra, pero estoy seguro q el Domador, calladamente, le amarrarara la lengua al Tifón a base de piñazos.