Elaborado en forma de torta con yuca rayada y cocinada al horno, el casabe es muy popular en las provincias orientales aunque en otras provincias también se conoce. Es costumbre remojarlo en agua con sal y usar como envoltura con carnes elaboradas con mucha salsa o grasa, como la carne de cerdo.

El casabe constituía el pan de los aborígenes cubanos, que lo moldeaban en forma circular y cocinaban sobre una piedra de superficie lisa calentada por el fondo.