Televisión cubana: Al Mediodía detrás de cámaras

Cuando el reloj indica el meridiano del día, Bárbara Sánchez Novoa y Marino Luzardo conducen frente a cámaras el programa dirigido por Odalys Torres González. Sin pedir permiso entran a los hogares de miles de cubanos que prefieren informarse a través de los medios audiovisuales.

Mientras los espectadores reciben música, entrevistas y recomendaciones televisivas, un equipo de realización trabaja simultáneamente para lograr el mejor resultado. Tribuna de La Habana accede al estudio 15 de la televisión cubana y comparte las experiencias de este colectivo Al Mediodía.

Desde las 11:00 am, al terminar la transmisión en vivo de Ruta 10, el equipo comienza el montaje del set y la directora supervisa las pruebas de sonido de los músicos. Con disciplina, exigencia y ternura, Odalys Torres indica las posiciones de los invitados en la escenografía. También desarrolla un trabajo de mesa con Jeffrey Lombillo Marín, coordinador del programa, y Arnaldo Díaz, primer asistente.

Al comenzar el programa, Odalys controla los planos, la imagen y el sonido. Desde la consola en la cabina de realización, como ella dice, “donde ocurre todo”, establece comunicación con el coordinador en estudio. Con cada expresión, muestra orgullo por contar con tantos jóvenes talentosos en su equipo de trabajo. De igual forma, se dirige a todos con respeto y determinación.

“El mayor reto resulta tratar de cada día tener algo que a la teleaudiencia le llame la atención. Tenemos que estar todos muy conectados. Lo que más disfruto es que el programa es en vivo y que mi equipo me sigue. Me encanta trabajar así”, confesó Odalys Torres.

A su llegada al estudio, Marino comienza con los preparativos para salir al aire. “Por lo general ya venimos preparados al estudio. Nos entregan el guion con tiempo. Siempre busco información por otras vías porque todo lo que conozca sobre esa persona me va a servir”, comentó el destacado conductor de radio y televisión.

“Muchas veces los invitados se proponen para venir al programa porque necesitan promocionar algún evento. Hacemos un trabajo de mesa previo con ellos y pautamos los momentos de la entrevista. Todo el programa gira en torno a una persona y luego recibimos otros invitados que enriquecen la entrevista principal”, añadió Marino Luzardo.

Para Bárbara Sánchez Novoa trabajar en Al Mediodía representa al mismo tiempo un disfrute, un desafío y una responsabilidad. “Mi día a día en el programa resulta un poco acelerado porque el horario no es tan cómodo como uno se imagina. Eso hace que, desde muy temprano, todo esté en función de encaminar a mi niño de nueve años y luego me concentro en preparar lo que diré y de producir una imagen. Es un proceso creativo y una aventura. Cada invitado hace que el programa se renueve”, afirmó la conductora.

“Existe siempre el desafío de saber que estamos en vivo. Cada vez que me confío pasan las cosas, lo que demuestra que un buen profesional siempre debe superarse. Aprendo mucho de Marino, Odalys y de todo el equipo. Cada especialidad es importante. Deseo para el programa que duremos mucho tiempo al aire. Al Mediodía ha sido un regalo de la vida porque permite entrar a cada hogar sin pedir mucho permiso. Me encanta la interacción que hemos logrado en redes sociales”, agregó Sánchez Novoa.

Ya el reloj marca la 1:00 p.m., pero el trabajo en el estudio 15 de la televisión cubana no termina. Al contrario, después de tantas labores delante y detrás de cámaras, el equipo prepara nuevamente el set y los guiones para los próximos días, cuando llegarán a los televidentes cubanos con nuevas propuestas Al Mediodía.

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