En estos meses del año se constata un incremento de los microvertederos y desechos sólidos abarrotados en contenedores, (buena parte de ellos deteriorados), en comunidades de la ciudad.
Esta situación es objeto de comentarios de vecinos y visitantes en las localidades, y trae consigo preocupación lógica debido a que nunca antes alcanzó las dimensiones del momento actual. Este sensible asunto repercute en el saneamiento que favorece la salud y permite sustentar la adecuada imagen que debe prevalecer en la capital.
Las opiniones de los ciudadanos en los barrios son diversas, según las circunstancias que concurren en cada lugar. Entre las más recurrentes escuchadas se encuentran: déficit y rotura de recolectores de basura sin poder sustituirse por carencia de recursos, demora de días para vaciar los contenedores por parte de los camiones asignados a la limpieza en la zona, antes tenían periodicidad diaria y hoy por múltiples razones no es así, se debe a escasez de combustible o falta de piezas de repuesto para el transporte, el ciclo de recogida de los desechos está alterado lo cual incide en la diseminación de basura en calles, aceras y áreas de parques.
La solución no es cambiar de lugar constantemente los contenedores como acontece a veces, o como dirían nuestros ancestros, vestir un santo y desvestir otro, ni tampoco ubicarlos en avenidas y arterias priorizadas para el tránsito vehicular, sino situar los que precisan las comunidades de acuerdo a su densidad poblacional y sobre todo, poder volver a cumplir el ciclo de recogida necesario lo cual evitaría los microvertederos.
También ha proliferado la indisciplina social, hay falta de inspectores, guardaparques y quizás también de personal en Servicios Comunales comprometidos con esta loable labor social que debe asumirse como prioritaria, y alcanzar el reconocimiento que merece esta importante actividad y evitar las serias consecuencias que puede acarrear.
Cuando recorremos las localidades ciertamente encontramos estas problemáticas. Sin embargo, apreciamos compañeros que ponen todo su empeño en el barrido de calles, algunos con gran eficacia y responsabilidad cumplen su misión, pero ven empañada su tarea cuando surgen microvertederos en el entorno.
Por la importancia del tema es preciso seguir buscando soluciones y alternativas que contribuyan a erradicar este delicado asunto que a todos los compatriotas compete. Y en este sentido trabajan mancomunadamente los factores y autoridades del Gobierno en los municipios generando ideas e iniciativas para solucionar esta problemática.
No obstante, todavía no podemos estar conformes con lo que en algunos espacios se ha logrado, hasta tanto el problema no sea resuelto plenamente.
Al caminar el interior de zonas del Cerro, Centro Habana, algunas de Plaza de la Revolución, Diez de Octubre y otros territorios que también padecen esta situación, observamos cómo se ha incrementado este flagelo.
Y resulta decisivo además, concienciar a los residentes en evitar contribuir al aumento de los microvertederos que a todos en la comunidad afecta, al exponerlos a vectores que pueden desencadenar enfermedades.
Existen también personas inescrupulosas que de forma injustificada, (estando aún los latones vacíos) acostumbran a verter sus desechos y hasta escombros fuera de los puntos establecidos. Estos casos merecen la alerta y repulsa de la población, además de alguna multa o contravención con carácter educativo por su infracción y gesto negativo para con sus vecinos.
La población cubana en Revolución sigue venciendo cualquier desafío impuesto por el criminal bloqueo de EE.UU. Y los habaneros siempre seguirán en la primera trinchera de combate contra todo lo que empañe la tranquilidad ciudadana, la belleza y buena vibra de los capitalinos.
Ver además:
Y si hay limpieza en nuestras calles, bienvenido sea, se agradece también
El basurero q acompaña al artículo es BB al lado del q está en la esquina de mi casa, ya la basura tapa los contenedores desbordados. Un barrendero de calles y parques hace años q no lo veo. Y tiene razón un forista en este mismo artículo cuando dice q la situación de insalubridad que se está viviendo es responsabilidad de sus directivos al máximo nivel. Es hora de pasar de estos artículos, que solo muestran la realidad q se está viviendo, a otros con deslinde de responsabilidades y soluciones concretas, como lo van a resolver es lo q se necesita saber. Que hay basureros por doquier eso todos lo saben
El artículo refleja con claridad la problemática, misma que se eleva a la centésima potencia en el Reparto Eléctrico (zona de los edificios desde la calle 4a hasta la 7a) donde casi cuadras enteras están repletas de basura en la calle (sobre todo en 5a) que incluso dificulta el tránsito de vehículos. La pestilencia es muy grande y el peligro para la salud del pueblo y al medio ambiente es enorme. Para colmo hay insuficientes médicos de la familia .....
Miércoles, 13 de diciembre de 2023. Anoche se inundó, una vez más, la 5ta Avenida, en el Consejo Miramar, Playa, ya no limpian ni las alcantarillas de la famosa Vía Expedita.
Buenos días, este no es un simple problema, es un problema bien grave, porque repercute en la higiene de nuestros barrios y en la salud de nuestra población. Se de los problemas q tiene nuestro país, pero es inconcebible q tarden meses en recoger los desechos, eso es dejadez, abandono de las autoridades competentes y sobretodo falta de sensibilidad humana. Todo esto lo digo respaldado en lo q veo q está sucediendo en Arroyo Naranjo que no fue mencionado, quizás entre en el término otros utilizado en el artículo. En María Luisa y apilar, Mantilla existe un basurero de más de tres metros de alto y más de veinte de largo, el cual lleva varios meses sin ser tratado y está a menos de cien metros de una zona de comunales, siendo muy bochornoso esto. Este macrovertedero impide la entrada al reparto Fraternidad, pues a este se une sumideros de todo tipos de agua q tienen tomadas la calle. Gracias
Almeno una solución con prontitud para eliminar las ciento de miles de mosca trasmitiendo infecion.