Tribuna de La Habana entrevistó a la primer analista del Órgano Especializado de Tránsito, primer teniente Ailed Borge, quien abordó el tema del peatón y su responsabilidad en la ocurrencia de accidentes en Cuba.
-¿Qué relación tiene el peatón con la ocurrencia de accidentes?
-El peatón representa, entre los tipos de accidentes, el 17% de la accidentalidad en nuestro país, esto significa aproximadamente 600 accidentes que están relacionados con el atropello de peatones.
"El peatón es el responsable del 74% de estos atropellos al lanzarse a la vía de manera incorrecta, abalanzarse entre vehículos y tratar de cruzar, por no respetar el semáforo peatonal que está prescrito y está determinado en la ley, y esto es lo que lo conlleva a ser un factor vulnerable en la vía.
"El sector que más afectado en los atropellos son los que están entre 40 y 70 años, esto indica que nuestros adultos mayores actúan de manera imprudente aun cuando tienen mayor conocimiento que los niños y jóvenes.

"A los jóvenes se les ha realizado un llamado por el uso de las tecnologías en la vía, y este sector tiene mayor visibilidad, pero menor repercusión.
-Se dice que el peatón tiene prioridad en la vía sea cual sea la circunstancia, aunque esto no lo exime de determinadas obligaciones, ¿hasta qué punto es cierto?
-Es cierto que el peatón siempre va a tener prioridad. Una vez que este se encuentre en la vía, el conductor debe tomar precaución, en dependencia de la circunstancia debe disminuir la velocidad o parar la marcha de su vehículo siempre que visibilice al peatón, aun cuando este esté cometiendo una infracción.
"También es parte del conductor proteger y velar por la vida del peatón, aunque este actúe de manera imprudente y no respete las señales.
"Esto hace que el peatón se sienta más seguro en la vía, por eso se hace este llamado, porque están actuando de manera irresponsable. Tienen que respetar el semáforo peatonal y el cruce.
"En las zonas donde no hay aceras, el peatón debe circular por la vía en sentido contrario a la circulación, para que el conductor lo vea y él vea al conductor. Este llamado es al peatón a que respete las leyes, y a los conductores para que sean más comprensivos aun cuando tengan la razón.
"Al peatón hay que protegerlo, porque muchas veces va acompañado de un niño, de un adulto mayor o es propiamente un adulto mayor o un niño. Esto hay que respetarlo y sentirlo.
"En la escuela de conducción hay una máxima, y es que cuando el peatón pone un pie en la vía, los conductores deben parar. De esta forma se evitan los accidentes, y a la vez esta máxima empodera al peatón. Por lo que acompañado a la máxima llamamos a la precaución al peatón. Todos somos, en general, usuarios de la vía, por lo que debe primar el respeto. La cultura vial es armonía.
"Estamos haciendo bien con esta campaña de comunicación, es importante insistir por los medios de comunicación y las distintas plataformas. En la medida que eduquemos y lleguemos a un mayor número de usuarios de la vía, que prácticamente somos todos, minimizaremos el número de accidentes y los impactos asociados.
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Totalmente de acuerdo con todo lo expresado por la compañera oficial, ahora bien, se impone y de manera urgente que como autoridad se tomen medidas severas con los peatones infractores que van por las vías provocando todo tipo de hechos, situaciones y accidentes incluso masivos con su indisciplina social que muchas veces no es por imprudencia sino por ser temerarios, bravucones o simplemente ser indisciplinados sociales y no tener amor propio por su vida o siquiera la de los demás, no importa que tengan las aceras en mejores condiciones que cualquier avenida o vial, usted se los encuentra a cualquier hora caminando hasta en grupos a cualquier hora por las calles como si fueran los reyes de esta y lo peor es que la autoridad competente los ve y no actúa, algo a lo que tienen que darle un vuelco radical de 360 grados además de toda la promoción educativa que están realizando.
Ha disminuido considerablemente la presencia de las autoridades del tráfico y su trabajo en la vía pública. Nadie respeta los derechos de los peatones en la vía pública. La calzada de Guine carece de señales y vías para el cruce de personas, no se considera cuando pasa un anciano, un niño para la escuela, si no te echa a correr ningún conductor es capaz de moderar la velocidad. Las luces de los semáforos están opacas por falta de mantenimiento ya que están cubiertas de polvo. Si no se exige la disciplina ciudadana con orden y autoridad, e incluso judicial, jamás seremos disciplinados .
Hace falta orden y autoridad judicial para que se cumpla todo lo que sobradamente sabemos y se dice en el escrito. Hay que orientar el trabajo judicial hacia otras direcciones ciudadanas.
Estimados analistas del Tránsito, Partimos de que ninguna estadística por pura que parezca deja de estsr comprometida con causas y efectos. No es la primera vez que las estadísticas crudas nos aplastan: No es que deje de preocuparnos el peaton involucrado con hasta un 17% de la accidentalidad, o sea 600 atropellos en los cuales, el peatón es el responsable del 74%. Dentro de los que se lanzan a la vía de manera "incorrecta" un alto porciento son viejos. A quienes no damos plenamente el beneficio de la subjetividad, de pensar que un porciento de ellos pudo haberse lanzado para terminar con una vida que pudo haber sido en los últimos tiempos quejumbrosa, por reiterados olvidos, abandonos y otras dolencias materiales objetivas. Conozco a varios en el barrio que pudieran albergar tales "formas incorrectas". Lo cierto es que existen otras realidades vistas desde otro prisma y lógica; también puede responder a otras inercias menos estadísticas y no menos amarga cuando pensamos que un chofer al asirse a su timón debe tener claro que tiene un arma letal manejable en sus manos. Debe tenerse en cuenta que nuestros peatones, adultos mayores actúan desarmados en un campo de batalla dominado por vehículos potentes y veloces . El "viejo" anda como regla psicomotora ensimismado en su mundo lento, terminal. No dudo, como se dice, que el peatón pudiera tener prioridad palestina por usar solo sus piedras de tropiezo para agredir, aunque sea este solo un concepto ancestral que incluye una única forma de ofensa y defensa bajo determinadas espiritualidad de convivencias violentas. Una vez más, muchos, ante analisis sobre el tránsito en nuestro país caemos en el detalle de atenuantes: tales como poca visibilidad, obstáculos de baches, escommbros, basura, estado técnico, lucidez, prevención", detalles que nos obliga a participar en las soluciones colaterales. Denunciar estas circunstancias para que también al sonrojarse, sientan penas los gresponsables. Cualquier analisis debe igualmente mostrarse implacable, hay que incluirle la responsabilidad de hacer visible los espacios viales al peatón, aun cuando este esté cometiendo una infracción. Gracias