La ética, integridad, humildad, consagración al trabajo y compromiso con la ganadería y la medicina veterinaria del doctor Ernesto Díaz Mulet, fueron destacados por colegas y amigos en homenaje póstumo, organizado por la Asociación Cubana de Medicina Veterinaria.
Al rendir tributo a Mulet, en presencia de su familia, José Ángel Ramírez Oriyés, presidente de la Filial Habana de la Asociación Cubana de Medicina Veterinaria (ACMV), destacó algunos pasajes de su biografía, recogidos en un audiovisual.
Conmovedoras fueron las historias, testimonios, anécdotas y criterios compartidos sobre su personalidad, su manera de hacer, dirigir y actuar, por quienes conocieron a este veterinario y combatiente de la Sierra Maestra, fallecido recientemente debido a "una enfermedad que no merecía", según sus compañeros.
Cuando llegó a la zona oriental del país, como subdelegado de Ganadería, "Mulet llevó un nuevo estilo de trabajo y empezó a desarrollar los aspectos de la ganadería vacuna y la sanidad animal, con una característica singular: no iba para casas de visita, traía una hamaca y la plantaba de noche en las vaquerías y allí dormía y compartía las labores que hacían los vaqueros diariamente, hasta establecer los valores reproductivos, productivos y sanitarios", recordó Silverio Tamayo Ortega, último director del Instituto de Medicina Veterinaria.
"Se creó una leyenda con Mulet, los ganaderos de oriente lo adoraban por su sencillez y su nobleza, todos querían que los visitara, los enseñara, compartiera con ellos sus conocimientos", dijo Tamayo, quien elogió su calidad humana, prestigio, y la familia respetable y amorosa que supo construir.

"Nunca vi a Mulet hacerse el bárbaro ni mucho menos, ni maltratar ni ofender a nadie, por lo que será siempre inolvidable", enfatizó.
El veterinario Armando Pedraza, colega de larga data, le dedicó una frase del dramaturgo alemán Bertold Brecht: “hay hombres que luchan un dia y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida: esos son los imprescindibles. Ese fue Ernesto Díaz Mulet".
Su honestidad, claridad de pensamiento, su liderazgo y el ejemplo que daba al indicar alguna tarea, algo que se necesita en los momentos actuales, fueros otros rasgos destacados por sus compañeros veterinarios.
Pedro Roca, con quien trabajó en los años 60 del pasado siglo, recordó la asesoría y acompañamiento que como veterinario le dio Mulet, cuando a él, cuadro político, le dieron en 1967, sin saber nada de vacas, la tarea de fundar el Instituto de Medicina Veterinaria. "Era un estilo de trabajo distinto, era un compromiso con lo que estaba haciendo. Nunca lo vi maltratar a nadie, ni vanagloriarse de nada, no le gustaba que se dijera que era teniente del Ejército Rebelde", dijo.
"Era un hombre que tenía un mérito tremendo, pero que no hacía ruido de eso ni trataba de ganarse un puesto de importancia, todo lo hacía con sencillez, honestidad e integridad. Hay personas buenas y muy buenas, pero él era extraordinario. Era compañero, amigo y hermano de la vida", sentenció.

Según rememoró Elpidio Lara, también colega cercano, jefe y subalterno, daba siempre el ejemplo, se ganaba el cariño y la atención de las familias campesinas, incluso en momentos complejos para la ganadería, de brucelosis y tuberculosis, "cuando decía las cosas de manera que lo entendieran y no se molestaran".
Beatriz Amaro, presidenta de la Asociación Cubana de Medicina Veterinaria, destacó la importancia y confianza que le concedía Díaz Mulet a la mujer en el sector. "Él estaba seguro que las mujeres ponían alma, corazón y vida y eso para nosotras era extraordinario", enfatizó.
Por otra parte, Amaro anunció que la junta directiva de la asociación acordó otorgarle a Ernesto Díaz Mulet la condición de Miembro de Honor.
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EPD MI querido tío te desea tu familia del Oriente de Cuba, Cayo Mambí, Holguín. De tu hermano Juan Díaz Mulet, Grisel, Yohan y Arioldis.
Que pena, hace poco me entero de la notícia del fallecimento de mi colega y especial amigo de siempre Mulet, todo de lo que se há dicho de ese ejemplo de persona humana y médico veterinario es cierto y poco , nunca permitio que se hicieran injusticia, y de eso en lo personal me consta , siempre me apoyo. EPD mi amigo Mulet En mi tua condiciones humanas estaran siempre presente hasta el final de mi existencia en este ciclo terrenal que Dios nós destina Dr Cordoves, Brasil