Jóvenes agroecólogos cubanos expusieron conocimientos, intercambiaron criterios y compartieron vivencias y proyecciones en el taller virtual Juventud y Agroecología por la soberanía alimentaria y nutricional, insertado en la I Feria Internacional Agrobiodiversidad y Alimentación.
De acuerdo con Yusvan Contino Esquijerosa, integrante del Grupo de Jóvenes Agroecólogos de la Asociación de Técnicos Agrícolas y Forestales (ACTAF), el evento tuvo como objetivo intercambiar experiencias sobre el trabajo de las organizaciones con las juventudes en el ámbito agrario.
Transmitido en vivo mediante la red social Facebook, el taller dio la posibilidad de socializar acciones y resultados de las entidades en su atención, orientación y estímulo para mejorar las producciones agroecológicas.
En el encuentro, que permitió fortalecer la articulación e integración entre las organizaciones, entidades, personas jurídicas y naturales vinculadas a la agroecología que aportan al trabajo con las juventudes, se debatió acerca de juventudes y soberanía alimentaria y nutricional, panel coordinado por el especialista de la representación en Cuba de la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), Jerome Faure.
Desde el Centro de Estudios sobre Juventudes (CESJ), las investigadoras Yansa Terry y María Ofelia Bombino disertaron acerca del debate sobre juventud rural en las investigaciones científicas.
Alina Beltrán y Contino Esquijerosa presentaron el programa de equidad generacional de la ACTAF, mientras Claudia Ortega García, de Matanzas, expuso sobre Albaoa, el camino hacia una finca agroecológica y sostenible. Otros temar abordados fueron La Red Juvenil Ambiental de Cuba (ReJAC) en pos del medio ambiente, a cargo de la ingeniera forestal Yaneli Peña Guerra, su coordinadora nacional.

El segundo panel Experiencias del accionar de jóvenes dentro de las producciones agroecológicas, incluyó la propuesta de política para la agroecología en Cuba, por el experto Giraldo Martín Martín, de la Estación Experimental de Pastos y Forrajes Indio Hatuey, y Accionar del Grupo de Jóvenes Agroecólogos de la ACTAF en el período 2018 – 2020, tema sobre el que expuso Otto Manuel Andérez Ramos, del Instituto de Investigaciones Fundamentales en Agricultura Tropical Alejandro de Humboldt, mientras que Contino Esquijerosa se refirió a experiencias exitosas del trabajo con jóvenes en fincas agroecológicas de Matanzas.
Otras temáticas del taller fueron las buenas prácticas y manejo agroecológico de cultivos, de fincas y parcelas, aspiraciones y demandas juveniles en post de la agroecología y sus proyectos de vida, la formación vocacional y orientación profesional hacia los perfiles agroecológicos y los círculos de interés, vigencia, actualización y desarrollo para promover las ciencias agrícolas y la cultura agroalimentaria en niños y niñas.
La I Feria Internacional Agrobiodiversidad y Alimentación, que se desarrollará hasta el sábado 16 de octubre, es promovida por la Cátedra Agroecológica Julián Acuña Galé, de la Universidad de Camagüey, y se enmarca dentro de las acciones promovidas por el Plan de Soberanía Alimentaria y Educación Nutricional (SAN).
Organizada en el contexto del Día Mundial de la Alimentación, que se celebra cada año el 16 de octubre, la feria cuenta con el patrocinio del programa Impacto, Resiliencia, Sostenibilidad y Transformación para la Seguridad Alimentaria y Nutricional (FIRST), de la alianza FAO-Unión Europea, y del Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (FIDA).
En esta primera feria participan también representantes de entidades, organizaciones e instituciones nacionales, entre ellas, el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA), las Brigadas Técnicas Juveniles (BTJ) y la Asociación Cubana de Producción Animal (ACPA).
Otras informaciones:
Es necesario que se rectifique la orientación que dicen los organizadores de las colas han recibido. Que sólo pueden dar 20 turnos para impedidos o vulnerables. Mientras existe el producto a la venta en la tienda y por la cola normal pasan 50 y 50 más y pueden vender hasta 300 o mas personas. Es ilógico limitar la venta a los impedidos mientras que a las personas normales en cola pueden pasar hasta 300 o más. Si somos humanos mientras exista el producto y se mantenga la cola debe mantenerse la cola de impedidos y debe irse alternando 20 impedidos y 20 de la cola. Porque los impedidos y personas ancianas vulnerables deben siempre poder comprar. A veces despues que cogieron los 20 casos vulnerables resulta que pasan solo dos vulnerables y 15 de la cola normal. Cuanto tuvo que esperar el número 20 de los vulnerables para comprar DIEZ VECES 15 DE LA COLA NORMAL 150 personas. No es correcto ni humano ni equitativo. Deben pasar al menos la misma cantidad de vulnerables que personas. Normales. ¿Y quien le da solución a esto.?