Los cubanos que somos tan dados a mostrar con efusividad nuestros sentimientos, nos hemos visto obligados a postergar besos y abrazos ante la presencia del nuevo coronavirus que nos obliga a querernos en la distancia.

A pesar de que muchos ya estemos vacunados contra la COVID-19, se sigue insistiendo en que no podemos descuidar las medidas higiénico-sanitarias implementadas. El distanciamiento físico, el lavado frecuente de las manos y superficies, y sobre todo el uso del nasobuco seguirán marcando nuestros días por un buen tiempo.

Y si a eso le añadimos que muchas personas transitan por la enfermedad sin mostrar síntomas (los llamados asintomáticos) con más razón debemos mantener la distancia entre las personas, evitar hacer o recibir visitas y salir de casa cuando sea estrictamente necesario.

Postergar hoy besos y abrazos nos permitirá hacerlo mañana con la alegría de haber vencido también a la pandemia.

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