Transformación en esquina de Malecón y Galiano

En el pavimento, con la escultura Primavera como centro, hay figuras de geométricas de colores y cebras para un cruce de calle imaginario. En las paredes, los trazos hacen la vegetación que hoy no pudo ser. La esquina de Galiano y Malecón, en Centro Habana, tiene hoy una imagen diferente.

No pocas mentes y manos han hecho posible el cambio, que introduce para La Habana prácticas que pudieran experimentarse en otros sitios, en pos de ir rescatando espacios que tanto lo necesitan.

Esa acción en específico la materializó la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo (AICS), como parte del proyecto Recualificación urbana integrada para la valorización local y el apoyo a economías innovadores, biológicas, sostenibles, comunitarias, creativas y circulares, más conocido como Avenida Italia, done participan los gobiernos de La Habana y del municipio Centro Habana y Unión Cameral Piamonte, de Italia.

Según Aymé Plasencia, asistente técnica de proyectos de cultura y desarrollo local de la AICS, el proyecto general incluyó acciones que desarrolló directamente la agencia y en este caso, a su esfera le correspondía la formación de actores jóvenes.

Enfoque en las juventudes

El componente gestionado por la sede AICS de La Habana realizó actividades culturales, cursos y talleres que involucraron principalmente a jóvenes de ámbitos diversos. Con esas acciones formativas se contribuyó a desarrollar habilidades profesionales y empresariales, potenciar la formación artística y nuevas oportunidades de empleo, así como de intercambio y creación de redes.

El taller de urbanismo, que concluyó el proceso iniciado en febrero pasado en el Laboratorio urbano de ideas para Avenida Italia (calle Galiano), y la materialización de las ideas construidas por las y los jóvenes participantes, fue el cierre de una serie de talleres realizados desde 2023, que beneficiaron a un centenar de muchachas y muchachos de diferentes perfiles profesionales.

Dedicado al urbanismo táctico, esa última acción incluyó un diagnóstico a lo largo de toda la Avenida Italia, “donde existen espacios que no tienen nada, hoy están feos y para ellos construyeron ideas”, dijo Plasencia.

Para el arquitecto Kyovet Sánchez, de Ad Urbis Arquitectos, que condujo el proceso del último taller, “lo singular de esto es que antes de llegar a la definición de ideas, se hizo un laboratorio urbano con una convocatoria para diferentes perfiles profesionales: arquitectura, geografía, emprendimientos, diseño, activismo, sociología, psicología, economía y otros. De las cerca de 30 personas que se presentaron, se escogieron 15, balanceados entre mujeres y hombres y en sus perfiles profesionales, sostuvo el arquitecto.

En las dos semanas de duración, primero, “se concibieron ideas para temas que tienen que ver con actividades económicas, accesibilidad a plataformas para generar trabajo y empleo digno, vivienda, espacio público y renaturalización, entre otros”, dijo.

En la segunda semana los ejercicios se enfocaron en el espacio público, accesible, seguro, vibrante y de calidad, con elementos transversales: urbanismo feminista, perspectiva de género, cuidado, diferencia de roles, por qué los hombres usan la ciudad de una manera y las mujeres, de otra, y en equipos hicieron sus propuestas.

Luego, se escogieron las mejores ideas y se configuró con coherencia una para la intervención de activación, que buscara solucionar carencias básicas del espacio.

En su puesta en práctica participaron la mipyme Más construcción y el proyecto sociocultural Arte 92. De acuerdo con el arquitecto Eddy Jesús Ramón Miranda es socio y administrador de Más construcción, este proyecto parte desde la visión integral de la AICS, una visión bien interesante, porque genera una voluntad política para poder hacer una estrategia de desarrollo vinculada con diferentes actores, de la Universidad Tecnológica de La Habana (Cujae), el estudio de arquitectura Ad Urbis, el gobierno de Centro Habana”.

"A partir de un taller que se desarrolló a inicios de año, donde se formularon estrategias urbanas para la recuperación y regeneración de diferentes sectores de la ciudad, se tomó esta esquina como principal nodo estratégico para intervenir entonces. Como socio, arquitecto y ciudadano formé parte de este taller, y a partir de ahí, entramos en vínculo de colaboración y cooperación entre todos esos actores”.

Karla María Lemus, arquitecta de profesión, quien desarrolla un proyecto de reciclaje textil, Akares shoppitraspo, dedicado a transformar ropa, participó en el taller de moda circular, que la dotó de herramientas que desconocía y la preparó para mejorar su proyecto.

Luego, como arquitecta, se sintió motivada a unirse también al de urbanismo y arquitectura: “fue muy interesante participar, compartir con todos los profesores que impartieron clases, aprender de inteligencia artificial y sobre la actualización de los planes urbanos que existen para la ciudad de La Habana”.

"Hoy me siento muy motivada y feliz de ver que se esté realizando, porque vivo muy cerca de la Avenida Italia, este es mi espacio público…y contribuir a que la comunidad de Centro Habana también tenga un espacio, con una mejor calidad para que puedan jugar los niños y estar los ancianos, me llena de satisfacción haber participado en un proyecto como este”.

Suset González, especialista en museología del convento de Santa Clara de la Oficina del Historiador de la Ciudad de La Habana, fue una de las beneficiarias.

Para la joven, el taller “completó el ciclo” y al incluir propuestas de la comunidad, “incorporadas en el diseño, permite que sea un lugar cuidado”.

“Muchas personas mayores ha venido y comentado que ahora tienen un espacio donde sentarse y disfrutar. En lo adelante, habrá que incorporar, por ejemplo, un cesto de basura, no incluido inicialmente en esta intervención artística y urbana”.

El artista visual Javier Agudo, miembro de la Asociación Hermanos Saiz y coordinador del proyecto sociocultural Arte 92, dedicado al arte urbano y la intervención pública en función del mural, explica que hace dos años tiene vínculos con el gobierno de Centro Habana y la cooperación italiana y se sumó al taller de Graphic Novel primero, y al de urbanismo después.

“Estoy muy orgulloso de que esto se pueda hacer en un lugar tan importante de la ciudad, donde se está revitalizando y rescatando de alguna manera un lugar que en algún momento estuvo subutilizado y deprimido visualmente”, señaló.

A su juicio, reparar los pisos y darle un poco de vida con el color, transforma el espacio, que “se va a convertir en un lugar para la familia, todavía no hemos terminado de trabajar y ya lo está logrando".

Un aporte a Centro Habana

Acerca de la importancia de esta intervención, Michel Ferrer Martín, intendente de Centro Habana, señaló que para Centro Habana, el municipio más pequeño del país, pero a su vez el más poblado, es quitarle una herida y darle vida, es darle un espacio más para la juventud y al pueblo para su disfrute y su recreación.

“Este y otros espacios que vamos a tener en Centro Habana forman parte de la interrelación entre la Agencia Italiana de Cooperación para el Desarrollo y el gobierno de Centro Habana y el gobierno de la capital”, agregó.

De acuerdo con Ferrer Martín, esto está muy vinculado con la Estrategia de Desarrollo Local, que establece espacios como este en otros lugares del municipio que revitalizan las comunidades y los consejos populares, vinculando a los diferentes actores económicos que están en la zona, para sus sostenibilidad.

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