Termina marzo (primer trimestre de 2023) y para Aguas de La Habana el cuartico no ha cambiado nada: Bloqueo recrudecido, trabas para acceder a créditos, falta de financiamiento, y en consecuencia, limitaciones con el combustible, los repuestos y recursos. El parque está menguado, pero…
“Pese a todo, ni hemos renunciado ni renunciaremos al propósito de cerrar este año el Programa cero pipas, y acabar llevarle el agua por tuberías a quienes todavía la reciben en carros cisternas, unas cuatro mil personas, nuestra prioridad número uno”.

Lo ha dejado en claro Leonel Díaz Hernández, director general de la entidad, a nombre de todo el colectivo. Reto espinoso, bien lo saben, pero, al decir de Leonel, los titubeos son inadmisibles frente a un compromiso asumido frente a la máxima dirección del país, que de materializarse, supondrá tremendo alivio para los beneficiados, con el consiguiente ahorro de combustibles y neumáticos, además de disminuciones de la intensidad en la explotación de los medios de transporte, que -de ser necesario- podrían emplearse en otros menesteres.
La idea como meta fue planteada hace cuatro años. Entonces ascendían a 10 000 las personas aquejadas. En medio de un panorama bastante complicado, el camino más aconsejable apuntó hacia las inversiones menos complejas que representaran mejoras para un mayor número de personas. Y ahí están los resultados.
Aunque todavía el viento sopla fuerte y en dirección contraria, cumplir implica algunas inversiones de cierta envergadura: Rehabilitación en el sistema de acueducto de Gavilanes, en Boyeros, con estación de bombeo, redes y conexiones, incluidas; también mejoras en las redes, del reparto Acuña. Más o menos lo mismo en el poblado La Cantera, en Playa, y otras acciones para lo cual “contamos con las tuberías, en tanto se fabrican en la Isla, pero tenemos poca disponibilidad de accesorios. Esos dependen de las importaciones”, acotó Leonel.
“La pelea es de león a mono, pero no nos vamos a dejar acorralar por las limitaciones, y cuando menos, como en períodos precedentes, le arrancaremos un pedazo al problema”.
Leonel habló de otros trabajos, que si bien no tienen incidencia directa en el Programa cero pipas, significan mayor estabilidad y garantías en el suministro, aumento de presiones o ambas cosas a la vez.
Puso dos ejemplo: Conductora Lucero Oeste, ahora mismo bastante avanzada, y llamada a enlazar el Sistema Central con Cuenca Sur, y en la intersección de (las calles) Perla y la Pastora, que unirá a Cuenca Sur con el abasto a Arroyo Naranjo, prácticamente el municipio de la capital con peor situación en cuanto suministro y único sin asociaciones con otros sistemas.
“En esta esquina está previsto instalar un impulsor como parte del diseño de la interconexión”, precisó.
El timonel de AH hace referencia a otra adversidad a superar para gestionar y distribuir el agua: “Además de todo lo apuntado, también las roturas e imposibilidad de reponer los equipos de bombeo. “El año pasado en nuestros talleres de electromecánica rescataron 35 bombas.” Poco, de compararlos con los ritmos habituales, mucho, si se toman en cuenta que prácticamente, muy poco o nada tenían en las manos.
DE TRAMO EN TRAMO

Maroly Guillart Ferrer, subdirectora de Mantenimiento de Acueductos en AH, une voces a Leonel.
No hay pan, casabe; de no poder correr, camina; imposibilitado de llegar primero, al menos alcanza la meta. Rezan los refranes o indica la lógica. Los directivos de la empresa también han sacado cuentas:
“Como no tenemos para las grandes obras, nos hemos volcado a la sustituciones de aquellos tramos en que se producen salideros reiterativos o de consideración; también cuando por el nivel de deterioro, reparas y en breve aparece otro escape en el mismo lugar o muy cerca, con lo cual provocan inestabilidad en el sistema”.
Según cuentan Maroly han unido fuerzas otras entidades del sector en la capital y entidades constructoras, las cuales, a principios de año, identificaron 32 tramos a sustituir (alrededor de cinco kilómetros), de grandes tuberías, con diámetros que van desde mil mm hasta 400 y distancias que pueden llegar hasta los 200 metros.
Y de tramo en tramo, ya suman ocho, los cuales totalizan unos 300 metros distribuidos en todos los sistemas: Centro, Este, Oeste y Sur.
Sin importante es bombear y poner el agua en los hogares también lo es evitar las pérdidas por salideros. Y precisamente de eso se ocupa la subdirección de Mantenimiento a Acueductos.
“En enero y febrero se promediaron entre 3 700 y 3 800 diariamente, tanto en redes como conductoras”, precisó Maroly. El miércoles, por ejemplo, la ciudad “amaneció con 2454 escapes. Hemos bajado y esperamos seguir disminuyéndolos. Cada jornada damos respuesta de 120 a 130 órdenes; no solo contemplan salideros. También hacemos mantenimiento en válvulas o sustitución de ramales. Estamos conscientes de que estamos todavía lejos de las exigencias”.
Aguas de La Habana ha vuelto a los barrios en condiciones de vulnerabilidad, con presencia en todos los municipios de la capital. Empezaron el año con un levantamiento que se tradujo en casi 900 acciones a realizar de enero a diciembre, de las cuales -abarcan desde la supresión de un salidero hasta obras de pequeña o mediana magnitud- ya el 53% fueron llevadas a feliz término.
SANEAMAIENTO Y ALCANTARILLADO

Andrea Miranda López, directora de Saneamiento y Electromecánica de AH, anunció, en lo tocante a ambas actividades, un 2023 todavía lejos de lo óptimo, pero sí con saltos discretos en los indicadores de eficiencia en estos frentes.
“Cerramos diciembre con 560 vertimientos (de aguas negras) en la vía, ya estamos en 318 y el propósito es despedir el año con unas 200”.
Estamos hablando de una actividad compleja y costosa, pero se trabaja:
“Estamos entregados al mantenimiento del Sistema Central de alcantarillado, la Estación de Bombeo de Casa Blanca, el sistema de alcantarillado de La Lisa (calle 220) y San Miguel, además de otras obras en este frente y también en el drenaje, que de conjunto alcanzan casi 500 acciones en los llamados barrios vulnerables, de las cuales se ejecutaron unas 200”.
No es todo, hay más, pero imposible reflejarlo de una sola vez; aun así, tal vez poco para quien no le ha llegado la solución de su problema, sin embargo, suman miles aquellos que, a solo tres meses de haber comenzado el 2023, Aguas de La Habana, les visitó con un toque de alegría, y para ellos, la entidad además del preciado líquido, produce entrega y hace derroche de sacrificios.
Ver además:
Continúan las ferias agropecuarias en los municipios de La Habana
Hola,cómo van a ser capaces de arreglar tantos salidero ,si en sus propias instalaciones el agua se despilfarra a diestra y siniestra.Creo que antes de prometer tanto deben revisar en sus propias instalaciones,no es posible que hace más de un año haya un salidero en las tomas de agua de Cuatro caminos,que sirve de baño publico,lavadero,fregadero,etc,etc
En ave 35 entre 104 y 106 toca el agua 1 día si y otro no ,cuando el día que toca el salieron de agua es grande,no hacemos nada con decir ahorren ,si el agua se bota.Otro caso en ave 33 entre 104 y 106 marianao lleva mucho tiempo reportado el agua potable con tremendo salidero,y al lasa agua albañale también con salieron vertiendo en la calle ,son reparaciones que al parecer son fáciles y sin embargo el tiempo que llevan ,después lo hacen difíciles hasta hechas a perder las calles.
En calle 4ta entre 1ra y . Calzada de . Güines, Reparto California, San Miguel del . Padron existe un saludito ya histórico que desperdicia muchos metros cúbicos de agua potable en medio de la actual sequía. El agua a las casas llega con dificultad. Cuando se resolverá está situación. Lo arreglan y el arreglo dura poco. Esto dura ya varios años .
Sigo sin entender estos articulos. ¿ viven en otra ciudad?. La cuidad esta plagada de salideros. Los trabajos que acometen, no los revisan y casi siempre es peor. No tapan los huecos, lo hacen mal, tupen los tragantes y no los.limpian. Para nada buen trabajo, mas bien dilapidan los.pocos recuersos que tienen.
Desde el 1ro de junio del 2022 hice un reporte porque mi entrada de agua estaba contaminada con agua albañal, vino muy pronto un inspector y dictaminó que era el registro 24 de frente a mi casa y el de la esquina de Luis Estévez que estaban tupidos, mi cisterna se contaminó y después de nosotros vaciarla y limpiarla estuvieron mandándome pipas como x 2 semana después un inspector del laboratorio dictaminó que ya el agua no estaba contaminada no sé cómo sin haber limpiando el registro 24 y mi entrada de agua sigue bajo el agua albañal, me dejaron de mandar pipas y hasta hoy nadie se a ocupado más del asunto pesar de haber hecho varios reportes, mi mamá falleció en diciembre con una erupción en todo el cuerpo y yo siento picazón constante en la piel, les he explicado que soy una persona vulnerable porque estoy operada de un carcinoma de pulmón, mi situación la conocen todos en la cuadra, desde el presidente del CDR que además trabaja en el consejo de Estado y a través de él lo supo la delegada pero hasta hoy 9 meses después del primer reporte no está todavía la solución, es una lástima que en tanto tiempo no hayan podido enviar un carro de alta presión para limpiar el registro 24 según ellos x falta de petróleo y sin embargo cuanto petróleo no gastaron en tantos viajes de pipa, yo sigo esperando pacientemente.