Que la COVID-19 se ha erigido en reto para mil y un proyectos de desarrollo personal, así como múltiples encomiendas sociales, no constituye un secreto.

Bien lo sabe la dirección de la Imprenta adjunta a la Empresa de Aseguramiento y Servicios del Ministerio de la Agricultura (EAS-MINAG), una entidad que sintió la amenaza a su nivel de eficiencia con el arribo del caprichoso virus, justo cuando el colectivo sindical se alistaba a un salto tecnológico y productivo sin precedentes, al adquirir y comenzar el montaje de prensas altamente costosas de la marca alemana Koenig & Bauer AG (KBA), nada menos que el segundo mayor fabricante del mundo de este tipo de maquinaria, con cerca de 200 años de experiencia.

Desde los tiempos de Gutenberg asociamos la palabra "imprenta" exclusivamente con la tinta y el papel. Meterle tijera dentro de una imprenta al corcho, acrílico, vidrio o metal sonaría al oído común como un acto descabellado, pero "nada más lejos de la verdad", confiesa Yamilet Montané González, su directora, en un encuentro pactado con Tribuna de La Habana a propósito de cumplirse 18 años, este mes de Mayo, del surgimiento del centro.

Yamilet Montané González, directora de la Imprenta EAS -MINAG. Foto: Pavel López Guerra

"Cuños, bolígrafos, gigantografías, impresiones en cristal, metal, madera, trabajo de encuadernación o foliado de documentos, confección de rótulos para el transporte o señalética, y hasta trofeos o placas conmemorativas, también forman parte de la línea nuestra y de una imprenta moderna".

Algunas de las líneas de producción de la imprenta: (de izquierda a derecha y de arriba a abajo) organizador de tarjetas y porta celulares en acrílico, pieza grabada y recortada en madera, cuños para empresas y carpetas duras. Foto: Pavel López Guerra

A todo color y para todos los gustos

Como bien explica Montané González, la diversificación de las líneas productivas representa, además de un hecho, un mecanismo efectivo de desarrollo y supervivencia, aunque tal circunstancia no le ha quitado al papel su corona.

"Nuestro principal objetivo continúa siendo la producción de la marquilla y envoltura del cigarro o tabaco en moneda nacional para las fábricas bajo el sello de TABACUBA", añadió.

La impresión de marquillas y envolturas para TABACUBA continua al centro de la producción. Foto: Pavel López Guerra

"Luego, para el grupo empresarial LABIOFAM -otro cliente fuerte- confeccionamos variedad de etiquetas de sus medicamentos, químicos y biofarmaceúticos. Nuestro órgano rector, el MINAG, demanda a su vez la tirada de los modelos, libros, folletos que hacen parte de su funcionamiento interno, por mencionar solo algunas de las múltiples esferas que atendemos".

Numeritos hablan

La flamante KBA en espera de su explotación y casi a punto de concluirse el montaje industrial. Foto: Pavel López Guerra

Abocados como nunca antes al incremento de su capacidad líquida y con ingresos en el orden de los 1,4 millones de pesos mensuales, la Imprenta EAS-MINAG comenzó en 2014 la instalación de la flamante KBA, su "gallina de los huevos de oro". Pese a las trabas que la COVID-19 ha puesto a la importación de algunas piezas para su puesta en marcha definitiva, ya se prevee una aceleración marcada del ritmo de producción, uso más racional y eficiente de la fuerza de trabajo y la materia prima, así como un aumento de la variedad de sus servicios.

Otras líneas de trabajo: gigantografías, proceso de foliado de documentos, agendas y etiquetas para producciones en conserva de empresas subordinadas al MINAG. Foto: Pavel López Guerra

Leonardo Sao Cruz, joven Diseñador-Editor de la empresa nos ilustra:

"Por supuesto que las nuevas líneas requieren una mayor especialización del personal. Entran en el campo del diseño industrial. Al tratarse de objetos tridimensionales, deben estudiarse estructura, perspectiva, funcionalidad".

"Sobre ello hemos venido capacitando a la fuerza laboral que ronda los más de 50 trabajadores", reflexionó.

A mal tiempo buena cara

Así las cosas el taller de marras no planea tirar la toalla por la omnipresencia de la COVID-19, nos avisa su directora.

El colectivo de la Imprenta EAS-MINAG en plena efervescencia productiva. Foto: Pavel López Guerra

"Hemos redefinido precios para varios productos que generan ingresos importantes en MLC, como las llamadas "carpetas duras". Tenemos, además, un dossier listo para distribuir entre clientes potenciales en la zona del Mariel cuando los protocolos sanitarios lo permitan y perspectivas de vínculos con empresas cubanas de bebidas y licores en función de imprimirles etiquetas de alta calidad".

"El descanso no es una opción", cierra Montané. "Hoy más que nunca tenemos que aferrarnos a la máxima de que a mal tiempo, buena cara".

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