El rechazo de la población y los criterios de condena a quienes realizaron actos de vandalismo en el recién inaugurado Mercado de Cuatro Caminos, de La Habana, demuestran que la indisciplina social no tiene seguidores en hechos como este.
Así lo han manifestado lectores de Tribuna de La Habana por todas las vías de comunicación, en respaldo a las autoridades al aplicar sanciones, de acuerdo con la gravedad de los hechos, a todos los implicados directa o indirectamente en este delito, que causó pérdidas inmediatas debido a la rotura de tres puertas enrollables, un paño de puerta de cristal y barreras de circulación, daños estimados en un costo de más de 2000 USD; mientras que desde el punto de vista comercial causaron daños aproximadamente de 5 000 CUC, según información brindada por CIMEX.
Si calculamos las pérdidas en daños por el monto de ingresos calculados en cada día, la cifra ascendería a 27 000 CUC y si agregamos daños por perjuicios, estaría en el orden de los 35 000 CUC.
La reapertura de este importante centro comercial habanero se inició este martes sin contratiempos.
Esperemos que podamos conocer, con la prontitud que permitan las investigaciones pertinentes, las medidas aplicadas a los responsables de estos hechos.
Hay que poner mano dura a todas esas acciones vandálicas
Hay un viejo refrán que dice: se saca un ojo por ver tuerto al otro/ los enemigos de la patria hacen lo imposible por opacar las obras de la revolución realizada con enorme esfuerzo y sudor de tantos hombres y mujeres
Es muy lamentable todo lo sucedido y creo que los autores de estos lamentables hechos tienen que ser sancionados y debían hacerle un juicio público y publicar en la prensa plana todos los encontrados culpables y la snción impuesta. Pero a los directivos de CIMEX y en especial a los del Mercado de Cuatro Caminos, tienen la responsabilidad de no haber previsto varios puntos de ventas (Karpas, kioscos y otros), con los mismos productos que se ofertaban dentro del mercado y así evitar las aglomeraciones; esto está orientado hacerlo; pero no se hace siempre. Nuestros enemigos no sólo están en el extranjero, también los tenemos aqui y algunos por unos centavos o por pacotilla; se aprovechan de nuestros descuidos y nos atacan donde menos lo esperamos.
Aplicar la ley con rigor,para q los oportunistas no repitan este hecho y controlar a los merolicos q tan mala impresión dejan en esta sociedad
No estuve allí pero siento verguenza ante nuestros dirigentes y ante quienes se sacrificaron tanto para que este bello mercado brindara servicios. Será wue no estanos a la altura de estas cosas tantan bellas?.Que ejemplo le damos a los niños u jóvenes.