La inmensa explanada aledaña a la sede de la Empresa Eléctrica de La Habana se colmó de azul. Cientos de trabajadores del sector portaban sus uniformes, o también pulóveres del color que los identifica. Se dieron cita allí para festejar acontecimientos que les son consustanciales.

Uno de esos es el Día del Trabajador Eléctrico, cuya elección, el 14 de enero, reverencia la actitud antiimperialista y marcadamente popular de Antonio Guiteras Holmes, quien hace 85 años firmó la nacionalización de la entonces Compañía Cubana de Electricidad.
Otro hecho es del presente más cercano, pero igual se sustenta en la heroicidad distintiva de quienes integran las filas de este bien llamado ejército de luz. Se trata de su contribución para devolver el servicio a los municipios afectados tras el paso del tornado, el 27 de enero último.

Hace poco la capital despidió a las brigadas de otras provincias cubanas que vinieron a darnos su apoyo, y en un tiempo record de cinco días borraron los impactantes daños ocasionados por el fenómeno meteorológico. En aquel momento los capitalinos continuaban en los barrios, solucionando cuestiones propias del servicio comercial, averías y demás aspectos precisados de una pronta respuesta, en virtud de asegurar la calidad que esperan los consumidores.
Por sí solo hablan estos números capaces de ilustrar cuánto esfuerzo requirió instaurar la normalidad.: hubo daños sobre más de 271 postes, 40 kilómetros de conductor, 410 de acometidas, 1610 crucetas y 237 transformadores. Lo recordó el liniero Walfrido Pérez Cardó, quien en nombre de los suyos mencionó una recompensa que no se iguala: “el grito de alegría de la vecindad cuando al fin se hacía la luz”.
Los 24 colectivos de mayor protagonismo fueron estimulados por el integrante del Comité Central y Primer Secretario del Partido en La Habana, Luis Antonio Torres Iribar, y otros invitados al homenaje. También hubo entrega masiva de reconocimientos y previamente se distinguieron diez hombres y mujeres de la empresa por sus aportes durante más de 20 y 25 años de labor ininterrumpida en el sector.
Minutos antes, Taymi Elizalde Torrizo, secretaria general del buró extraterritorial de la Empresa, evocó las respectivas misiones de cada una de las numerosas áreas de la entidad, que de cierta manera se entrelazan en el objetivo común de garantizar una prestación vital para la economía y la vida cotidiana del pueblo.

El ministro de Energía y Minas de Cuba, Raúl García Barreiro, hizo referencia a fortalezas con que hoy cuenta la capital cubana desde el punto de vista eléctrico, que permitieron enfrentar el peligroso tornado.
Puso de ejemplo la radialización de la red soterrada de La Habana Vieja, con lo cual se logra la independencia de los circuitos, en aras de que cada uno tenga su propio transformador y alimente líneas específicas.
Se cuenta también con nuevas subestaciones en las localidades de Guanabo, Alamar, San Miguel del Padrón, Santa Fé, Santa María del Rosario, entre otras, hasta sumar once.
El titular elogió la organización, disciplina y profesionalidad demostradas, e hizo mención a cómo entre las estrategias figuró no reanudar el calentamiento de ninguna línea inmediatamente después de terminarse las labores. Primero se hizo una revisión para comprobar la calidad de los trabajos.
Como nunca es tarde si de homenajear se trata, este lunes se enalteció el día a día de los eléctricos, y también los hechos que desde lo excepcional, siempre dejan enseñanzas.
Con la entrega de siempre se levantaron los electricos para devolver la alegria de la población de los municipios afectados por el Tornado Muchas Gracias sobre todo la hermandad y la solidaridad conque los caracteriza a todas las provincias presente y a las que no vinieron pero supimos que estaban alistadas para venir en nombre del Pueblo de Diez de Octubre nuestro eterno agradecimiento a los electricos pues varias avenidas y Calzadas cambiaron su rostro de oscuridad por nuevas luces. SÍ por la Constitución.