Las condolencias a las familias que han tenido que lamentar pérdidas de vidas de sus integrantes, lesiones y afectaciones a sus bienes, fue el primer mensaje que en nombre del Gobierno, el Partido, del Consejo de Ministros y todas las organizaciones del país, transmitió el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros Miguel Díaz-Canel Bermúdez, durante la Mesa Redonda de este miércoles.
El mandatario cubano compareció ante el espacio informativo de la Televisión Cubana, durante el cual destacó algunas características del tornado que impactó a la capital el pasado 27 de enero, “muy diferente a lo que estamos acostumbrados a asumir dentro de los planes de prevención de riesgos y también de recuperación”.
Hizo una reseña desde la evolución del fenómeno, las previsiones hechas por el Instituto de Meteorología –INSMET- y del Estado Mayor de la Defensa Civil.
“No estábamos desprevenidos, aseguró, lo que no podíamos anticipar, adivinar ni predecir que se podía formar un evento de tal magnitud -EF4, según la escala de Fujita- novedoso en materia de actuación, con un efecto devastador, y que solo había pasado por Cuba en la década del cuarenta del pasado siglo en Bejucal”.

Tras evocar la inmediata actuación de las autoridades de la capital cubana, resaltó las hermosas imágenes e historias de vida de cómo rescatistas, enfermeros y demás personal del hospital Materno de Diez de Octubre, popularmente conocido como Hijas de Galicia, atendieron y preservaron la vida de los pacientes, en particular los niños.
El mandatario trajo al presente momentos como su llegada a un edificio sin techo, donde había personas muy afectadas psicológicamente. “Una señora me alentó mucho y sobre todo me dio la dimensión del compromiso que todos adquiríamos, al decirme: Yo sabía que alguien nos visitaría y estaría aquí”.

Valoró cómo desde los primeros momentos pudo aquilatarse “la actitud de un pueblo solidario y también guapo, que en medio de un impacto y de enormes afectaciones estaba combatiendo”. “Actuamos con las enseñanzas recibidas de Fidel y de Raúl, y con la escuela que es la Revolución”, e insistió en cómo la estrategia ha sido proteger vidas, recuperar los servicios básicos, atender a los damnificados, planificar la recuperación y escalonarla, bajo la defensa de premisas como la organización, la prioridad a los más vulnerables, la sensibilidad y la eficacia en la tramitación e información al pueblo. “Levantar obras más hermosas donde el tornado dejó destrozos”, fue su llamado.

Muy detallada resultó la información ofrecida por el General de División Ramón Pardo Guerra, Jefe del Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil, quien relató los hechos desencadenados por el tornado en los municipios Cerro, Diez de Octubre, Regla, Guanabacoa y La Habana del Este.
“Aquí no se perdió tiempo”, afirmó tras resaltar cómo la prontitud en las actuaciones propició que en apenas siete días se alcanzara el 90 por ciento de la rehabilitación de todos los sistemas vitales para atender a la población damnificada y la recuperación económica.

Elogió la profesionalidad, organización y rapidez demostradas por los Consejos de Defensa provincial y municipales, las Fuerzas Armadas Revolucionarias, el Ministerio del Interior, las organizaciones de masas, cuentapropistas y la población con sus múltiples muestras de solidaridad.
El titular del Ministerio de Salud Pública, José A. Portal Miranda, enumeró las afectaciones a 19 instituciones de salud: un hospital, cuatro policlínicos, 10 consultorios, una farmacia, un centro de vectores y dos hogares de ancianos, siendo Diez de Octubre el territorio más afectado.

Significó la disposición de los trabajadores del sector, de manera especial los de los centros afectados y particularmente del hospital Hijas de Galicia, el cual quedó totalmente inhabilitado. Al momento del paso del tornado había 196 pacientes, 50 de los cuales eran recién nacidos y de estos 17 estaban en terapia intensiva. Todos fueron evacuados.
El ministro informó que de los 195 lesionados atendidos en varias instituciones de la capital, hoy quedan ingresados 18, y de ellos 5 se encuentran en estado grave. Hubo que lamentar el fallecimiento de seis personas, cuatro en las primeras horas y dos el último sábado, producto de traumatismos. En todos los casos se les brindó la debida atención por parte de grupos multidisciplinarios.

Señaló que ninguna de las zonas afectadas ha presentado brotes epidémicos y destacó el protagonismo de los estudiantes, en especial los más de 5 000 de las Ciencias Médicas sumados a la recuperación de las instituciones y al trabajo en las comunidades, para evaluar problemas de salud. Instó a mantener todas las medidas sanitarias para asegurar la protección de la población.

Por su parte, el ministro de Energía y Minas, Raúl García Barreiro, abordó las acciones que aseguraron el suministro de electricidad, y la celeridad con que ingenieros y técnicos de mayor experiencia y conocimientos de los circuitos afectados, recorrieron palmo a palmo los municipios afectados, donde quedaron sin energía 201 546 consumidores.
Medidas de seguridad extrema impidieron la ocurrencia de accidentes, comentó el titular, quien hizo mención a la gran cantidad de líneas averiadas, subestaciones, circuitos, postes, conductores, acometidas, aisladores, transformadores, entre otros.
Indicó que fueron movilizados contingentes con 1200 trabajadores en unos 200 grupos de trabajo de varias empresas de la Unión Eléctrica, que la generación no reportó afectaciones ni en las centrales termoeléctricas ni en los emplazamientos de grupos electrógenos, y que el proceso de recuperación se hizo teniendo en cuenta los planes de reducción de desastres.

Estos fueron enriquecidos a partir de las experiencias de huracanes de los últimos 20 años y deben incorporar ahora las de este nuevo evento, además de otra fortaleza: la preparación del personal en las pruebas contra averías realizadas anualmente.
García Barreiro comentó que ahora están reforzados los carros de servicios, pues tras un evento como este de fuertes vientos aparecen interrupciones por falso contacto, fundamentalmente.
Puntualizó que en La Habana, como parte del programa de rehabilitación de redes, se construyeron 11 nuevas subestaciones de 110 kV. Esto le aporta a la ciudad mayor confiabilidad en su operación, unido a la posibilidad de interconexión por la red de distribución desde distintas zona. También disponer aquí de circuitos soterrados, constituye una fortaleza para la recuperación.
En cuanto a la red de gas manufacturado de la ciudad, que comprende los municipios de Cerro, La Habana Vieja, Centro Habana, Diez de Octubre, Plaza de La Revolución, Marianao y la zona de Peñas Altas, con 275 000 consumidores, se mantuvo el servicio todo el tiempo. Los trabajos para solucionar los salideros de gas que fundamentalmente surgieron en Diez de Octubre, fueron enfrentados con prontitud.
También sufrieron daños tres puntos de ventas de gas Licuado –GLP- en el municipio de Regla, dos de los cuales estarán rehabilitados este jueves. El otro sufrió daños totales y deberá terminarse durante el actual mes.
La Industria Alimentaria se recupera

Al intervenir en la Mesa Redonda de este miércoles, la ministra de la Industria Alimentaria, Iris Quiñones Rojas, mencionó que las principales afectaciones estructurales en ese sector se concentraron, fundamentalmente, en tres instalaciones: el molino de trigo José Antonio Echeverría, del municipio de Regla; en la fábrica de galletas de soda, Albert Kunts, en Guanabacoa y en la planta de productos cárnicos de la empresa mixta Bravo, en La Habana del Este.
El resto de las instalaciones industriales ubicadas en los municipios que sufrieron el paso del tornado tuvieron también afectaciones al no contar, en los primeros momentos, con el servicio de energía eléctrica que impedía reactivar sus procesos productivos. Entre estas se contaban más de 50 panaderías, tanto de la empresa alimentaria de la industria local como de la Cadena Cubana del Pan.

Destacó la ministra la actitud de trabajadores de entidades afectadas, como algunas panaderías, y otras del resto de la ciudad que desde los primeros momentos activaron los grupos electrógenos y reforzaron los procesos productivos garantizando, desde las primeras horas después del paso del fenómeno meteorológico, el pan de la canasta familiar a toda la población capitalina, incluida la de las zonas afectadas, e incrementar un grupo de producciones liberadas tanto de pan como repostería, asegurando esas ofertas que a través del comercio se hicieron llegar a la población.
Entre las medidas de aseguramiento, Quiñones Rojas mencionó que un grupo de industrias pertenecientes a ese ministerio, en el resto del país, trasladaron hacia la capital alimentos básicos, sobre todo lácteos, cárnicos y pesqueros, y posibilitaron establecer una oferta que, en sentido general, garantizó estos productos a la población.
En cuanto a las labores de recuperación emprendidas por la Alimentaria, la ministra destacó que los primeros en llegar a las dependencias afectadas para iniciar las labores de higienización y saneamiento fueron sus propios trabajadores, incluyendo algunos que habían sufrido daños en sus viviendas.
En cuanto a la producción de harina de trigo, la directiva destacó el apoyo recibido de otros organismos y aún cuando no existían todas las condiciones se buscaron soluciones alternativas para que de los tres molinos que garantizan ese producto a todo el Occidente del país, dos reiniciaran sus producciones, y el tercero, el José Antonio Echeverría, que resultó el más afectado, en menos de seis días lograra restablecer la producción, gracias a la labor de las brigadas de la Empresa Eléctrica.
En ese sentido destacó también las tareas acometidas por fuerzas especializadas de entidades del Ministerio de la Construcción para poder rescatar equipamientos que la fuerza de los vientos arrastró hacia el mar, evitando así que se siguieran deteriorando.

Asimismo, resaltó que las dependencias de la Industria Alimentaria, tanto locales como de subordinación nacional, han restablecido sus procesos productivos y se continúan las labores de recuperación en otros servicios que garantizan las producciones y señaló que otras alternativas también se han implementado para la descarga de los buques, hasta tanto se pueda volver al sistema que está establecido para esas labores.
La solidaridad, legado de la Revolución
Al término de la Mesa Redonda, Diaz-Canel destacó en esta hora de trabajo por la recuperación, el compromiso y la responsabilidad de todos con el pueblo y sugirió que tanta cooperación, tanto ejemplos a reconocer, dudas por aclarar y experiencia conmovedoras por contar, merecían organizar otro programo similar la semana próxima.

“Hemos vivido jornadas intensas de trabajo, disciplina, solidaridad y cooperación, durante las cuales hemos mantenido un llamado permanente a la sensibilidad de los funcionarios, a fin de evitar molestias innecesarias a la población”, dijo, al tiempo que exhortó a los afectados a tener paciencia, en tanto el daño ha sido grande y la recuperación total de todas las viviendas va a llevar meses.
Sin embargo, el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros trasmitió la certeza de que se va a trabajar a un ritmo rápido y sin dilaciones, con la convicción de que todo lo que se haga para volver a la normalidad también se hará por el cumpleaños 500 de la capital y por tanto deberá quedar más hermoso y mucho mejor.
Luego de explicar que habrá de incorporarse a los planes contra desastre lo aprendido durante estas jornadas, y agradecer la solidaridad de naciones hermanas, organizaciones y organismos internacionales, y empresas extranjeras, el mandatario cubano acotó que por martiana y unitaria, era imposible renunciar a la tradicional marcha de las antorchas con la cual, los patriotas más genuinos, se unen todos los años para rendir tributo al más universal de los cubanos.

Previamente, Luis Antonio Torres Iríbar, primer secretario del Partido en La Habana, detalló los pasos que se siguieron inmediatamente después de que el tornado impactara brutalmente a cinco municipios de la capital, y la respuesta inmediata por parte de todos: cuadros, organismos, organizaciones y el propio pueblo, incluso aquellas personas de las zonas afectadas.

Torres Iríbar ponderó el papel de la solidaridad, agradeció el acompañamiento de las máximas autoridades del país, de los trabajadores de todos los ministerios que les tocó un papel en la recuperación y sus propios titulares, que permanecieron casi todo el tiempo a pie de obra (MICONS, ETECSA, Comercio, Gastronomía, estudiantes de todos los niveles de enseñanza…), y dijo que una vez recuperados en lo fundamental los servicios básicos, lo más importante ahora es la venta y entrega de materiales a los damnificados, a fin de borrar también, en el menor tiempo posible, los daños asociados a la vivienda e inmuebles estatales.

Reynaldo García Zapata, presidente de la Asamblea Provincial del Poder Popular, habló de la organización y el rigor con el cual se lleva en la base el proceso de entrega de los donativos. En la segunda mitad del programa, normalmente de una hora de duración, mas esta vez extendido a dos dada la trascendencia del tema, se dio seguimiento a las labores para regresar la normalidad en frentes tan importantes como la vivienda, el abasto de agua y las comunicaciones.

En la venta de materiales, edificación y reparación de las unidades habitacionales están concentradas, ahora, los mayores problemas y urgencias. Se informó, además, que existen los materiales para dar respuesta a todos los casos y los organismos han donado un grupo de locales que permitirán adelantar la solución a importante número de afectados con derrumbes totales y, en los puntos de venta, además de estar creadas las condiciones para la comercialización, hay una constante vigilancia para atajar problemas y destrabar los entuertos que lamentablemente todavía aparecen por algún que otro lugar.

Antonio Rodríguez Rodríguez, presidente del Instituto de Recursos Hidráulicos (INRH), aseguró que hoy se bombea agua sin dificultades desde las fuentes de abasto, y los trabajadores de Aguas de La Habana, más allá de sus responsabilidades, trabajan en edificios de viviendas, casas individuales y establecimientos estatales, para garantizar el disfrute del servicio a partir del arreglo y montaje de las redes interiores y tanques para el almacenamiento del líquido vital.

La labor de los trabajadores de Comunicación ha sido muy ardua, tanto que algunas acciones son de tal magnitud que más allá del restablecimiento del servicio, permitirá su ampliación. Según informaron los representantes del ramo, para la vuelta a la normalidad quedan casos muy puntuales, sobre todo, en algunos lugares del municipio 10 de Octubre, donde el impacto fue extremo y el sistema montado era muy antiguo.
Además, se dañaron 27 radios bases de telefonía móvil y 16 mil 200 servicios públicos. Para solucionar estas averías se trasladaron fuerzas de comunicaciones de las provincias de Ciego de Ávila y Pinar del Río para apoyar a sus colegas de La Habana y restablecer lo antes posible los servicios, la cifra de trabajadores ascendió a más de mil.

Por su parte, Betsy Díaz Velázquez, ministra de Comercio Interior, aseguró que a los centros de evacuados se les ha garantizado gratuitamente la alimentación y los productos de primera necesidad a las familias. “Hemos acercado a las zonas afectadas 99 carpas con alimentos, se han hecho más de 700 mil raciones de comidas”, dijo.

Explicó que el fin de semana se realizó una feria de productos agropecuarios y se garantizó la venta de huevo, carnes y pescados enlatados, así como el pollo liberado. Además, reconoció que en las oficinas de trámites existen algunas dificultades. “El pedido de los materiales no puede ser mayor que la disponibilidad, como ha sucedido con los tanques, porque esto crea insatisfacción. Hay tanques, pero los estamos trasladando desde el centro del país a la capital”, informó.
Contruir, palabra de orden

“Tenemos muchas empresas que no han parado en los trabajos de recuperación. En la mayoría de los casos tuvimos que utilizar a varios choferes para maniobrar los equipos y que pudieran turnarse, para no perder tiempo”, aseguró René Mesa, Ministro de la Construcción, quien además puntualizó cifras sobre el estado de las viviendas y los materiales de los puntos de ventas en la capital: 5 mil 334 viviendas visitadas, reportadas como afectadas; 4 mil 812 viviendas avanzadas en su recuperación y con dictamen técnico; 505 derrumbes totales; 757 derrumbes parciales; 804 techos totales; 1453 techos parciales; 1815 que corresponden a la pérdida de algún impermeable, losas, etc.; más de 900 familias han recibido materiales; hay 289 casos resueltos hasta la fecha de la Mesa Redonda; 2 mil 333 tanques; 370 toneladas de acero puesta ya en La Habana y sus Rastros; 244 metros cúbicos de madera en los puntos de distribución; 1449 techos metálicos completos ya en la capital y que están siendo repartidos; módulos de puertas para 2013 viviendas, 1876 hogares, 1100 módulos hidráulicos, 1100 sanitarios, bombillos y sockets para 16 mil 50 casas y llaves para 1386 viviendas; 1261 toneladasde cemento entregadas, 3029 metros cúbicos de árido y 105 mil 305 bloques.

El presidente de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU), Raúl Alejandro Palmero, aseguró que son 11 mil 440 los estudiantes que han participado en las labores de recueración.
“Ha sido una respuesta impresionante, estuvimos concentrados en varias tareas: en el escombreo, el acarreo de materiales en los puntos de venta, la visita a las familias, los intercambios con la población, y en el movimiento de las donaciones y artículos de primera necesidad”, ejemplificó.

“Hemos vivido una escuela que está en los barrios, con el pueblo; hay una juventud y organizaciones dispuestas a continuar la Revolución y a defenderla donde sea necesario, y hay una generación que es la continuidad, educada en una escuela que se llama Revolución, bajo los principios de Fidel y de Raúl”, añadió Palmero.