Detectar a tiempo los defectos congénitos y proporcionar apoyo para que los recién nacidos desarrollen su potencial, fue el llamado hace pocos días de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), a propósito de la jornada por el Día Mundial de los Defectos Congénitos.
La atención continua, y dotar a las familias de este grupo poblacional de herramientas para que puedan crecer sin dificultades, fue el objetivo de la convocatoria.
La advertencia tiene su causa en América Latina y el Caribe, áreas donde aproximadamente una de cada cinco defunciones, durante los primeros 28 días de vida, se debe a problemas genéticos, llegando a ser en la actualidad una de las principales causas de muerte de los neonatos en la región, aunque estas anomalías, en su mayoría, se pueden evitar.
Para ello trabaja el sector de la Salud Pública en Cuba, desde su programa nacional de diagnóstico, manejo y prevención de enfermedades de este tipo, el cual se materializa en su red nacional de centros y servicios de Genética médica, que tiene uno de sus resultados más exitosos a través del Programa Materno Infantil.
La Mayor de las Antillas es uno de los 16 países de la región que cuenta con un sistema de vigilancia de defectos congénitos, diseñado desde la década de los años 80.
Este sistema se consolida, cada vez más, con la masiva formación de especialistas y el acceso universal a los beneficios de las modernas tecnologías en ese campo, que contribuye a disminuir discapacidades y aumenta la esperanza de vida de la población cubana.
(Tomado de Radio COCO)
Vea además: