La Escuela Latinoamericana de Medicina (ELAM), fundada por Fidel en 1998, en sus 20 años de creada ha graduado hasta la fecha más de 37 profesionales de médicos de 141 países, en diversas disciplinas de las Ciencias Médicas, de los cuales el 96% son médicos.
En la más reciente graduación, julio de 2019, egresaron 500 estudiantes de 84, una cifra que abre al mundo una puerta a la esperanza de millones de personas que hicieron posible la idea del Líder histórico de la Revolución cubana, cuando expresaba en el discurso de apertura de esa prestigiosa institución internacional integrada al sistema de salud de Cuba:
“La idea de un programa integral de salud y una Escuela Latinoamericana de Ciencias Médicas nació de dos terribles huracanes que azotaron al Caribe y Centroamérica causando un impresionante número de víctimas mortales e incalculable daño material. Entre las naciones afectadas se encontraban las dos más pobres del hemisferio”
Más adelante destacaba el propósito de la formación de esos médicos: “Lo más importante habrá de ser su consagración total al más noble y humano de los oficios: salvar vidas y preservar salud. Más que médicos, serán celosos guardianes de lo más preciado del ser humano; apóstoles y creadores de un mundo más humano”.
Prestige Yedidia Kele, estudiante de 5to. año, dirigente de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) para los alumnos del Congo, era apenas un niño que daba sus primeros pasos en su tierra natal, pero el sentimiento con el cual expresa sus palabras, es también una manera de sentir Fidel:
“La Elam es nuestra casa. Un centro que cuando sales egresado eres otra persona. Aprendes muchos valores. La calidad de la preparación recibida en esta escuela no la puedes imaginar, no es comparable con la de ninguna otra institución de su tipo en el mundo. “Con sus 20 años de fundada, nos sentimos parte de esa semilla que germinó en árboles frondosos por todo el mundo con el pensamiento de Fidel. Nosotros debemos agradecer al Comandante en Jefe, por la oportunidad que nos ha dado de estudiar medicina, entre representantes de más de cien naciones, de América Latina, Norteamérica, África, Asia, el Pacífico. Aprendemos las culturas de otras naciones y nos formamos como profesionales de ciencia y conciencia”.
Cheikh Ahmat Abdelkerim Brahim, estudiante de 5to. año de la Elam, proviene de la República del Chad, antigua colonia francesa, un país sin salida al mar ubicado en África central que limita con Libia al norte, con Sudán al este, con la República Centroafricana al sur, Camerún y Nigeria al suroeste y con Níger.
Su acento tiene más el giro del español hablado por los cubanos. En su rostro se muestra el orgullo cuando habla de ser parte de la Elam. “Estos 20 años no significan solo la fundación de una gran escuela internacional, sino que tiene un significado más profundo, es más allá de nosotros mismos, profesores, estudiantes y trabajadores, porque son veinte años de solidaridad, veinte años de internacionalismo.
“Nosotros que venimos de familias humildes, nunca imaginamos la posibilidad de prepararnos como médicos, ahora estamos a punto de cumplir ese sueño. Gracias a esta escuela, gracias a la solidaridad cubana que nos abrieron estas puertas para aprender no solo medicina, sino cómo tratar al ser humano”.