Los acontecimientos en Colombia muestran al mundo lo endeble de esa “democracia” que no soluciona los problemas socio-económicos basados en la desigualdad que afecta a millones de ciudadanos de esa nación del Sur inmersa en violencia y guerras por más de medio siglo.
El gobierno que preside Iván Duque incumple los Acuerdos de Paz y es demandado por la minga social e indígena por el quebranto sistemático a los derechos humanos y vida de sus poblaciones, víctimas de desapariciones y asesinatos. De igual manera las FARC han revelado que cientos de sus miembros han sido ultimados luego de adherirse al proyecto de paz.
En un contexto de presencia militar estadounidense creciente en ese territorio, los conflictos internos se agudizan ante la indiferencia de una administración que privilegia a sectores oligárquicos y centros de poder en detrimento de la inmensa mayoría de sus ciudadanos.
Resulta una afrenta al pueblo colombiano y a la comunidad internacional, quienes apostaron por la concordia en ese país, que continúen suscitándose cada día hechos de sangre, los cuales involucran al ejército, bandas criminales y paramilitares que operan en varios departamentos de su geografía.
Crece la inseguridad ante la falta de contención, por parte de las autoridades, de las muertes de líderes políticos y sociales que no cesan en Colombia.
La cacareada “democracia representativa” que defiende Washington y sus aliados en la región latinoamericana y caribeña están enfermas. Ello se constata también en los acontecimientos populares en Chile donde miles de personas reclaman cambios estructurales y el cese de la represión por parte de los carabineros con anuencia del gobierno.
Los pueblos están hastiados de injusticias, explotación del hombre por el hombre, y como tal están manifestándose en rechazo a las políticas neoliberales y de exclusión social de sus gobiernos.
Es hora que prevalezca la paz y se logre la tan necesaria unidad e integración regional que apunte al desarrollo sostenible de las naciones con mayor equidad e independencia.