Para calmar e hidratar la piel del rostro, aplasta un plátano hasta convertirlo en puré y aplícalo en el área deseada, luego de unos minutos retíralo con agua tibia. Si tienes el cabello reseco, mezcla un plátano con medio aguacate y aplícalo de la raíz a las puntas. Déjala por lo menos 30 minutos. Notarás un pelo más suave y brillante.