Resulta difícil separar los sentimientos que experimentó la destacada poeta Nancy Morejón, Premio Nacional de Literatura (2001), cuando a través de la imagen televisiva sintió el dolor de siglos de asfixia de los afronorteamericanos durante la ejecución pública de George Floyd, a manos de un policía supremacista blanco en Minneapolis, Estados Unidos. Así lo describieron sus palabras durante la presentación del nuevo poemario: Madrigal para un príncipe negro.
“Escribí estos poemas en un rapto de dolor y desesperación al conocer en La Habana la noticia de la muerte de George Floyd, ocurrida un 25 de mayo, en Minneapolis, a manos de un agente de la policía local. ¿Cómo era posible semejante acto de barbarie en pleno siglo XXI?”.
La interrogante no podía ser más que sangrada, vivida en medio de la impotencia y escribe su poema Príncipe negro para George Floyd, su grito de dolor ante tantos años de racismo, injusticia y deshumanización resumidos en un solo acto. Y nos recuerda el título de su reciente volumen su entrañable relación con Nicolás Guillén en aquel poema estremecedor: Madrigal; aunque salvando las distancias de una palabra nos lleva a un concepto mucho más desgarrador y universal, como lo enuncia este fragmento:
“Aunque su sueño era lanzarte al Mississippi,/ aquel caníbal de uniforme opaco/ ha quemado en silencio su rodilla/ sobre tu cuello inerte./ El humo de tu carne va subiendo hasta el cielo mojado./ Saltando entre las flores, el aire de tus bronquios/ persigue su fantasma hasta morder/ el colmillo sangriento del caníbal./
Y tú alientas, indómito, sobre el asfalto húmedo,/ bajo la sombra quieta de un manzano/ en Minneapolis,/ donde colocaremos, para ti,/ este brillante, este limpio/ príncipe negro nuestro, a tu memoria”.
Y no podía ser de otra manera. Nuestra Nancy Morejón, considerada una de las voces más notables de la poesía cubana contemporánea, entre dos siglos, reconocida a escala internacional y en universidades, devela las consecuencias del odio acumulado de la segregación racial que resume la barbarie bajo la cual sufren millones de personas en el mundo.