En un febrero de 1980, solo con cuatro meses de graduado como médico atendí en Manguito a una pequeña de apenas un año que fue conducida ante mí, donde estaba de guardia, con una parada cardiorespiratoria.

La reanimación fue satisfactoria.... Yanorkis Pino, así se llama la protagonista de la historia de 1980.

Hoy, apenas hace dos horas, alrededor de las12 de la noche, esperando a un colega en la Terminal 3 del Aeropuerto internacional José Martí, ante mis ojos, apenas a 6 metros, observo que se desploma el cuerpo de una joven y casi cae al piso. Momento de incertidumbre para muchos pero inicié sobre un banco rígido la reanimación cardiopulmonar de esta joven que después supe llegaba de Cancún...

Boca a boca, masaje cardiaco externo, inicialmente sólo y después apoyado por su abuelo... , su corazón arrancó, continuamos la ventilación a través de la maniobra boca a boca.. se localiza a la guardia del Puesto Médico del aeropuerto, ya Naomi, pues así se llama la joven, respirando con dificultad, aún con cianosis y latidos cardiaco óptimo.... se localizó camilla y la reintroducimos en el aeropuerto, en el local del Puesto Médico continuamos su observación y administración de oxígeno suplementario... La cianosis desapareciendo, ya Naomi consciente, me devolvió una sonrisa cuando le dije que volvió a nacer en su Cuba y le dije que en febrero de hace muchos años tuve que atender a una pequeña niña con una situación similar a la de ella...

Me despedí de su madre Guadalupe, de su abuelo y de otros funcionarios del aeropuerto, me sentia feliz, muy feliz!

Y si supieran ellos que muchas coincidencias permitieron que yo estuviera allí para luchar por su vida, decidí dar el viaje no planificado cuatro horas antes en Matanzas, llegue al aeropuerto a las 10 y 30 pm y la persona que esperaba pudo haber salido entre los primeros que salían, pero no, no era el justo momento, se demoraron sus trámites y salió al unísono con esta joven quien antes de desfallecer chocó con el carro transportador del equipaje de quien yo esperaba, él le preguntó si se sentía bien, ella respondió apenas con un sí balbuceante y ante nuestros ojos se desplomó... si él hubiese salido antes yo no hubiese estado allí para devolver a la vida a Naomi... Gracias mi Dios por escogerme b.

Ya la dejé en manos del equipo del SIUM que fue localizado dispuesto a trasladarla a otra institución con sus pupilas reactivas y consciente respondiéndome afirmativamente que Sí cuando le pregunté a ella y a su familia si me permitían tirarme una foto junto a la protagonista de esta historia..

Adriana Guerrero Enriquez

Dios le usa de bendición!!! Y hace el milagro con su sabiduría !!! Sin dudas !!

Foto: Jose Hernandez / facebook

(Tomado del perfil de facebook de José Hernandez)

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