La mañana de este 17 de febrero constituyó un escenario de gratitud para recordar y despedir al profesor de béisbol Armando Mayorquín, quien falleciera recientemente en la capital.
Autoridades del Instituto Nacional de Deporte, Educación Física y Recreación (INDER) del municipio de Cerro, profesores de nuestro pasatiempo nacional, atletas de esta disciplina ya retirados, así como un equipo de pelota de categorías infantiles, se unieron a los familiares y allegados del insigne maestro en el estadio Juan Ealo, ubicado en la Ciudad Deportiva, para esparcir sus cenizas en un terreno de béisbol; inmortalizando así el legado de enseñanza que por más de cinco décadas aún perdura.
El destacado educador y apasionado a la pelota se incorporó a la instrucción de este deporte en la década de los años setenta contribuyendo a la formación de múltiples generaciones de destacados jugadores que no solo brillaron en los Industriales, en Cuba sino en la arena internacional. Durante su carrera adquirió los títulos de Profesor de Béisbol, de Educación Física consagrándose finalmente con la licenciatura en Cultura Física.
Estuvo presente en calidad de misión técnica en Italia y en la República Bolivariana de Venezuela impartiendo sus valiosos conocimientos donde obtuvo excelentes resultados y reconocimientos profesionales. La opinión pública y las reacciones de sensibilidad y tristeza en las redes sociales demuestran el valor y la entrega incondicional con que Mayorquín cumplió con la tarea de su vida. Si bien, el béisbol en el Cerro y en La Habana está de luto, no se marcha para siempre quien permanece en la memoria cotidiana de sus compañeros y alumnos como sublime ejemplo del arte de enseñar.
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