Mientras los Industriales de la capital continúan su fiera batalla contra los caballos orientales de Granma en busca de uno de los boletos semifinalistas de esta atípica Serie Nacional No. 60, varios jóvenes, que hasta hace unos días vestían en el terreno el uniforme azul de las letras góticas, permanecieron en casa para ver “los toros desde la barrera”.
Se trata de un grupo de sustitutos, algunos de ellos de la reserva del equipo, que en su momento no dejaron caer la bandera capitalina en el polvo y que ahora, al verse disminuida la nómina del conjunto por los protocolos sanitarios estipulados en las burbujas, creadas por la Comisión Nacional para la postemporada, quedaron fuera del mayor espectáculo deportivo del país.
Considero necesario hacer un alto en los análisis de estos últimos partidos de playoffs para aplaudir a esos muchachos e inclinarme en una reverencia en muestra de respeto por la dignidad y el coraje que mostraron en el terreno de juego cuando las esperanzas azules amenazaban con irse por una de las alcantarillas de la historia.
Sin complejos y sin experiencia ninguna, algunos de ellos novatos o con escasas apariciones en series nacionales, sustituyeron a unos regulares contagiados con el maldito virus que ataca la humanidad y salieron al campo con las herramientas que tenían, mientras los espíritus de sus antepasados gloriosos los contemplaban en alguna esquina oculta del mítico estadio Latinoamericano. Siete victorias en ocho presentaciones logró la tropa de Guillermo Carmona, con varios de ellos en sus filas para arrancarles de la mano a otros rivales el tique de entrada a esta gran fiesta, en una acción que será recordada por mucho tiempo en los parques beisboleros.
Como es lógico, a la llegada de la “caballería” y después de despedirse alineando todos juntos con una victoria contra los Vegueros de Pinar del Río, se retiraron con esa satisfacción que da haber cumplido una misión suicida y con su vestimenta de héroes raída por los combates.
Ahora cuando todos los ojos están puestos en el ruedo neutral del estadio José Antonio Huelga donde los Industriales se baten “a muerte” contra un equipo superior en los papeles en otra de esas misiones difíciles, pero no imposibles, no debemos olvidar a esos muchachos que no pudieron estar porque la gratitud en silencio no sirve a nadie. Nos vemos en semifinales.
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Estoy muy d acuerdo d verás son Leones soy industrializar y para mí ganaron no sé mucho o nada d pelota pero los vi jugar bien y espero k cresca aún más y en su momento nos pongan bien en alto,aunke no sé pero para mí están en lo más alto del podio,los felicito y seguiré siendo Leona ganen o pierdan nunca los voy a despreciar,en un juego de gana o se pierde si no,no es un buen juego Felicidades muchacho uds ganaron y ganarán siempre pk están en los corazones d mi Habana
Si ese banco hubiera jugado más las lesiones seguro eran menores en la serie, recuerde periodista que jugaron con equipos no clasificados y con lesiones que nunca se dicen como VC que tenía sus tres abridores lesionafo
Sobre todo el último partido que jugaron con la reserva para perderlo y no enfrentar a Granma. Por favor , sea imparcial.
Tanto que criticaron en su momentro a las Tunas por supuestamente regalar un juego para eliminarlos y ahora lo hacen peor.
Granma jugo sin varias de sus figuras regulares y quedaron empatados con Sancti Spiritus.Sea mas profesional.