Los Industriales de la capital vinieron de abajo en el marcador y derrotaron con autoridad a los Huracanes de Mayabeque 12-6, para regresar a la ansiada zona de clasificación después de varias jornadas.

A la voz de "play ball" del árbitro principal, un Huracán impetuoso se adueñó del Coloso del Cerro y los inspirados muchachos de Michael González sacaron a la fuerza del montículo al abridor Eddy Abel García y al relevista Elder Nodal, marcando un racimo de seis anotaciones. Un cuadrangular de Luis Fernández con dos a bordo y un tubey de Yasnier González, que remolcó un par de carreras, incendiaron el rancho azul desde bien temprano.

Los felinos de la capital respondieron al instante cuando el toletero del momento Lisbán Correa mandó la esférica con dos a bordo a la segunda sección de gradas del estadio, para llegar a 24 e igualar la segunda mayor producción de un capitalino en una temporada.

Una entrada después los anfitriones se pegarían en el marcador al pisar dos veces más la goma del plato, cuando Wilfredo Aroche sonó cohete impulsador y Jorge Enrique Alomá trajo otra a casa con elevado de sacrificio.

El relevista Yandi Molina calmó los vientos de los visitantes durante 4.1 capítulos (un solo hit permitido) y los Leones aprovecharon para empatar el choque en la baja del cuarto capítulo. El tercer indiscutible de Aroche en el desafío se combinó con par de boletos concedidos del también relevista Mario Batista para congestionar los ángulos y Stayler Hernández, con otro elevado de sacrificio a los jardines, consiguió la igualada.

Fue el mismo capitán azul quien dos episodios más tarde impulsó un par anotaciones más para que su tropa alcanzara la ventaja definitiva cuando disparó un cañonazo de hit con las almohadillas repletas de Leones, todos llegados ahí gracias al descontrol de los lanzadores rivales.

Del resto se encargó el diestro Héctor Ponce con un tremendo relevo de cinco capítulos inmaculados reduciendo a cero la potente ofensiva de sus adversarios para arribar a cinco triunfos en la campaña.

Con esta victoria y la derrota de las Avispas a manos de los Tigres avileños, la tropa de Guillermo Carmona derribó al fin la puerta que permitía la entrada a la zona de confort y dormirá esta noche imaginando futuras hazañas en la post-temporada.

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