En tiempos de pandemia, el esfuerzo, dedicación y amor por el deporte se ha visto reflejado en mantener la adecuada preparación física, muchos desde sus propias viviendas.
La pareja capitalina de Carlos Pineda Pedroso (Arroyo Naranjo) y Yesenia Dinza Kindelán (Regla), unidos desde hace más de tres años en el amor y el deporte de judo, desde muy pequeños encontraron la vocación deseada y en su andar han obtenido buenos resultados. Estos campeones pioneriles provinciales y nacionales, obtuvieron plata y bronce en juegos escolares, además de resultados positivos en copas Cerro Pelado, entre otros.
Ante la COVID-19, decidieron juntos entrenar en sus viviendas, mantener la fortaleza física y profundizar en la aplicación de las diferentes técnicas, barras, planchas, abdominales, correr en las mañanas, utilización de suiza y mancuernas y los desplazamientos, entre otros ejercicios.
Ambos cinta negra; Yesenia prefiere utilizar la técnica uchimata y su compañero seoinage. Están orgullosos de integrar la selección nacional de judo y son estudiantes de la escuela Giraldo Córdova Cardín. Pineda nos comenta: “Hemos aprovechado este tiempo para repasar contenido ya estudiado, la lectura de libros propios del deporte ha sido importante además de los ejercicios realizados; ya estamos listos para enfrentar la nueva normalidad cuando se nos diga, cumpliendo con las orientaciones higiénico-sanitarias, distanciamiento y muy importante el uso del nasobuco”.
Por otra parte, Yesenia explica: “Hemos tenido que enfrentar momentos muy serios y difíciles por la enfermedad, es oportuno señalar el agradecimiento al personal de Salud por tanto sacrificio y salvar vidas, a nuestros entrenadores, familiares, vecinos, que nos guían en nuestros propósitos aplicando valores para todos, la disciplina será lo más importante para continuar venciendo y lograr lo más preciado, ¡la vida!”.
Estamos seguros que esta joven pareja mantendrá la forma deportiva y, en el nuevo tatami, darán un alegrón al pueblo cubano.