Los dioses del béisbol se cansaron de darles la bendición a un cuerpo de lanzadores relevistas inefectivos y cambiaron de trinchera cuando los felinos estaban pintando de azul la granja espirituana y se frotaban las manos mientras trataban de pasar la escoba por aquellas tierras.

La tropa de Guillermo Carmona mandaba 9-0, con un racimo de siete carreras en el quinto episodio donde destacó un doblete remolcador de Wilfredo Aroche y sencillos de Frank Camilo Morejón y Roberto Acevedo que trajeron leones a casa.

El abridor Yandi Molina trabajó cinco entradas en blanco bajo el fuego que provocó su propio descontrol (8 bases por bolas) y el diestro Héctor Ponce lanzó un par de entradas con una anotación a sus récords, cuando se desató la tormenta y los Gallos salieron de sus escondites a picar con furia.

No pudieron Raymell Pérez ni José Armando Pérez controlar el ataque de los anfitriones en la octava entrada. Dos boletos, un pelotazo, y cinco imparables con sendos tubeyes de los emergentes Geysel Cepeda y Diasmany Palacios remolcando un par de carreras cada uno, metieron en el partido a los de casa y pusieron bien feo el panorama para los azules.

Una anotación más en el cierre de la novena empujada por el sustituto Lázaro Viciedo frente a los envíos de Elder Nodal, obligó a la entrada extra donde los discípulos del olímpico Eriel Sánchez dejarían tirados en el campo a los líderes del campeonato.

No pudo Lisbán Correa producir en la entrada extra con dos hombres en las almohadillas y después de una base por bolas a Yamil Rivalta con las almohadas llenas que le dio una ventaja momentánea a los Leones, Aroche cedió el último out del capítulo.

La escena quedó lista para la definición en la parte baja del décimo episodio cuando Yoandry Baguet se sacrificó para adelantar a los corredores colocados en bases por la Regla Schiller, bolearon intencionalmente al peligroso Juan Carlos González y un lanzamiento salvaje que no pudo bloquear Oscar Valdés propició el abrazo en la pizarra.

El alto mando capitalino no tuvo otra opción que mandar para primera a Dismani Ortíz  para repletar los sacos de Gallos y Geysel, con un elevado de sacrificio a la pradera central le puso fin a esta historia dominical.

A pesar de la dolorosa derrota, los Industriales regresarán a casa con un buen botín de ocho victorias en doce salidas para asegurar la primera posición del torneo.  

Foto: Boris Luis Cabrera Acosta