Zhang Binsheng, de la ciudad china de Harbin, acudió a los médicos la semana pasada luego de sufrir una grave obstrucción en sus fosas nasales por tres meses. El hombre se sorprendió al descubrir que el bloqueo lo causaba una pieza dental la cual perdió durante un accidente cuando era niño (cerca de 20 años) y según el doctor, quien extrajo la pieza, de alguna manera logró enraizar y crecer. Al parecer, no fue rechazado como un objeto extraño por el organismo y eso evitó detectarlo.