Para preservar el bien más preciado que tenemos los seres humanos, la vida, por nuestra salud y bienestar, desde marzo de 2020, cuando comenzó a azotar la COVID-19 en nuestro país, nos hemos visto privados de importantes conmemoraciones de carácter político, histórico, cultural, religioso, y de cualquier índole, tal como ocurre con los Festejos Populares de Regla, tradición del habanero municipio que cada año celebra del 6 al 9 de septiembre.

Habitualmente, esta gran fiesta, enmarcada en la fecha de los festejos tradicionales de esta localidad, con la procesión de la Virgen de Regla y de los cabildos, tiene un carácter festivo, para el disfrute sano de la población de la localidad, con actividades deportivas, recreativas, juegos tradicionales y de participación, dirigidos a niños, jóvenes y adultos; culturales, con proyectos comunitarios y peñas de destacados artistas del territorio; ofertas agropecuarias, servicios de gastronomía y comercio, con la colaboración de otras entidades.

Pero esta vez, como ha ocurrido con otros festejos y eventos, ha sido necesario quedarse en casa, y a través de las redes sociales no dejar pasar por alto la tradicional celebración.

Iglesia de Regla Foto: Habana Radio

Razones religiosas, causales, históricas, y culturales han conllevado a su perdurabilidad

Nuestra Señora de Regla subsiste en el tiempo como emblema principal de una comunidad. La veneración que sienten por ella los habaneros y los cubanos en general, es tan grande y profunda, como antigua e interesante es su historia. Dichos festejos promueven y forman parte de su proceso sociocultural e histórico y son exponente de la identidad religiosa local.

Se han desarrollado en diferentes etapas históricas, cada una con sus propias características, las que han marcado pautas en los referidos festejos. La música siempre ha estado presente desde su inicio en 1687 hasta la actualidad.

La peregrinación de los fieles de la localidad y de otras regiones del país ha contribuido al mantenimiento de estos festejos a través del tiempo. Tiene una gran trascendencia, pues son distintivos y particulares de esta localidad habanera. Son significativas las donaciones de carácter económico, la fusión de manifestaciones religiosas y culturales nos permiten valorar y particularizar esa fe y su simbolismo religioso.

Historia de la virgen de Regla y su llegada a Cuba

Pertenecen a la leyenda, pero la historiografía existente ha podido comprobar sus principales datos históricos. Su origen fue aproximadamente en el año 433. La imagen escultórica fue tallada por San Agustín, doctor de la iglesia y obispo de Hipona, en el norte de África.

Virgen de Regla Chipiona Foto: Cortesía Museo Municipal de Regla

En el año 443, Hipona fue atacada por los vándalos, y un diácono llamado San Cipriano y otros monjes de la Orden de los Agostinos, huyen del país, cruzan el Estrecho de Gibraltar, y arriban a costas españolas, en las riberas de Chipiona, en Cádiz. A la virgen se le dio refugio en un monasterio de dicha ciudad, hasta que los moros invaden España.

Según las historiografías religiosas y laicas en 1687 llega la imagen pictórica de Nuestra Señora de Regla a Cuba, traída por Manuel Antonio (El Peregrino), en la rivera este de la bahía de La Habana, en la localidad Guaicanamar, nombre aborigen del sitio actual de Regla, que significa: frente al mar.

No obstante, la Dra. Alicia García Santana, en su libro Las primeras villas de Cuba, refiere el término Guaicanamá y le atribuye otro significado: Guaicana o guaicanax (árbol), y ma (grande).

Se dice que Don Pedro Recio de Oquendo realiza una donación de tierra a Manuel Antonio en Guaicanamar, para edificar la primera ermita, el 3 de marzo de 1687. Este documento queda certificado el 16 de enero de 1688.

Como comunidad histórica, estos orígenes están vinculados al espacio y al tiempo de creación del santuario de Nuestra Señora de Regla. Este hecho influyó en la formación del caserío o pueblo de Regla, en 1687.
Existe una marcada diferencia de la virgen de Regla, en cuanto a la aplicación del diseño del vestuario y atributos, con respecto a la de Chipiona. Esto nos permite atribuirle características eminentemente «criollas».

Peculiaridades de los festejos patronales

El culto a la virgen de Regla tiene sus orígenes en el año 1687, cuando los agustinos construyeron una precaria ermita de madera en el entonces pueblo de pescadores. En 1692, una tormenta la destruyó, y cuatro años más tarde fue reconstruida gracias a una colecta pública.

En 1708 fue nombrada Patrona de los pescadores del pueblo de Regla, la villa de La Habana y el puerto, y le fue otorgada la llave del citado puerto, símbolo que la distingue. Cinco años más tarde, el obispo Juan José Díaz de Espada y Landa decidió convertir el templo en una iglesia parroquial, lo cual se autorizó en 1805.

Los festejos patronales se caracterizan por la Misa Pontifical, novenario, procesión y fiesta de la Octava. Devoción por parte de los fieles católicos y los religiosos de origen africano. Elementos litúrgicos de origen católico; y, a partir de 1923, se enriquecen con la incorporación de la resonancia de los tambores Batá de los cabildos de origen africano. Sentido de identidad por parte de la población habanera. Se subvencionan a través de las contribuciones económicas de los fieles.

El azul se identifica como el color de la ciudad de La Habana, y se le jerarquiza como simbólico; sin embargo, su más remoto origen está en la declaratoria de la virgen de Regla, como Patrona del Puerto; y es este su color.

La procesión, en los espacios interiores y exteriores del santuario, constituye el resumen de los festejos. Debido a la ubicación geográfica (zona costera), el lugar cobra características distintivas de otros festejos patronales acaecidos en La Habana.

Fiestas Patronales de Nuestra Señora de Regla. Los Cabildos

La llamada “Salida de los cabildos” formaba parte de las fiestas patronales dedicadas a la Virgen de Regla, patrona de la Bahía de La Habana y consistía en procesiones que tenían lugar cada 9 de septiembre, independiente una de la otra, que portaban respectivamente cuatro imágenes del santoral católico: Nuestra Señora de las Mercedes, Santa Bárbara, Nuestra Señora de Regla y Nuestra Señora de la Caridad del Cobre, acompañadas del toque de los Batá, tambores sagrados de la santería.

Festejos patronales en 1921 Foto: Cortesía Museo Municipal de Regla

El día anterior, después de la procesión de la virgen de Regla, estas imágenes católicas eran depositadas en el santuario y allí “dormían”; a la mañana siguiente después de la primera misa, las imágenes eran sacadas en andas y al ritmo de los tambores recorrían el pueblo, haciendo paradas en sitios señalados como el emboque o embarcadero, donde se le hacían las ofrendas a Yemayá, oricha dueña del mar, diosa de la maternidad universal y protectora de los marineros y los pescadores, que desde la llegada de los esclavos yorubas fue sincretizada con la virgencita negra procedente de Chipiona, España.

Otros sitios eran la casa de Marcela Cárdenas, el mercado, el frente al Palacio Municipal y frente a la casa de todo el que quisiera, previo pago de los derechos correspondientes para dar coco al santo de la casa.

Otro lugar de parada oficial era el jardín ubicado en el terreno donde anteriormente había estado el cementerio, aquí se le daba coco a los Eggun de los esclavos africanos que allí habían recibido sepultura. En ese terreno se encuentra ubicada hoy la escuela primaria Leonardo Valdés.

Por último, se dirigían al cementerio actual y frente a sus puertas se daba coco, se tocaba y bailaba para todos los Eggun; aquí los participantes se “limpiaban” o “despojaban” con gajos de paraíso, después de la purificación, los gajos eran tirados al interior del cementerio y cada cabildo regresaba, entonces, a sus respectivos hogares.

Foto: Cortesía Museo Municipal de Regla
Foto: Cortesía Museo Municipal de Regla

En los últimos años, se ha rescatado esta tradición, una de las más populares del patrimonio intangible de la localidad

Referencias

Con información del Museo Municipal de Regla “Eduardo Gómez Luaces”. Propuesta del proyecto “Memoria e Identidad”. CASA TEMPLO ILÉ OLORÚM
Festejos populares de Regla. Datos tomados del Trabajo “Festejos Patronales”