De forma insistente se mencionan, como cada Feria, estos nombres en las noticias que por estos días dan la vuelta a Cuba, pero una duda siempre me asalta. ¿Cuánto se sabe de los homenajeados y todo lo que eso entraña para Cuba?
A la doctora en Ciencias Ana Cairo Ballester (post mortem) y al dramaturgo y guionista de cine Eugenio Hernández Espinosa está dedicada la 29 edición de la Feria Internacional del Libro de La Habana.

Espero que la voluntad de hacer y la autodisciplina me acompañen para concluir nuevos libros y para imaginar otros. (Ana Cairo, 2016)

La profesora e investigadora Ana Cairo, quien se definiera como una humanista, fue una incansable estudiosa de las cuestiones culturales y heredera de una ancestral tradición intelectual, representa una voz para el fortalecimiento de la identidad nacional, por sus notables aportes a la historia y la cultura de la nación, ella constituye lo que al decir del intelectual Julio César Guanche: “Un archivo de la memoria cubana”.
Su obra docente, investigativa y de pensamiento vanguardista, es fuente de referencia ineludible para quienes se acerquen a los procesos de la literatura y la cultura de la Isla.
En la Universidad de La Habana, casa de altos estudios que la acogió desde que se graduara en diciembre de 1972, formó bajo sus alas a muchas generaciones de alumnos, allí impartió Literatura y Cultura cubanas y cursos monográficos de personalidades, siempre desde la premisa de que entendieran lo ecuménico mediante la más genuina cubanía.
Dentro de su vasto quehacer educativo destaca el curso monográfico sobre José Martí, en la Facultad de Artes y Letras, por el cual es reconocida una autoridad en el tema.
En su legado bibliográfico, por solo mencionar algunos, destacan los textos El Movimiento de Veteranos y Patriotas (1976). Bembé para cimarrones (2005), Viaje a los frutos (2006) y José Martí y la novela de la cultura cubana (2014).
Por su incansable labor, impacto y trascendencia de su obra, recibió la Distinción por la Cultura Cubana, la Medalla Alejo Carpentier y el premio Nacional de Ciencias Sociales y Humanísticas, entre otros.
Muchos amigos de diversos países me lo dicen: piensan, y no equívocamente, que los nacidos aquí, sin percatarnos, respiramos y rezumamos sensualidad y sexualidad en la vida cotidiana. Que no pocas mujeres caminan y se mueven en las calles con un contoneo lascivo y provocador. (Eugenio Hernández Espinosa 2004)
Actor, director artístico y teatral, Eugenio Hernández Espinosa, es reconocido como uno de los dramaturgos más relevantes del teatro cubano contemporáneo, su obra dramática festeja lo popular, principalmente por reflejar la realidad del pueblo, que retrata a las clases populares y que ha roto con los enfoques prejuiciados en torno al negro y su problemática, con una mirada que evade prejuicios y estereotipos, mientras recrea la mitología africana (yoruba), con su poética, símbolos y deidades, representando lo viejo del arte popular en Cuba en sus textos.
Su visión holística del teatro, cual reflejo de la compleja sociedad cubana contemporánea, le ha permitido abordar –con aguda mirada en varias de sus piezas– otras problemáticas y contextos del difícil espacio nacional, tal el rural, como el tema del racismo.

Dentro de su producción sobresalen, María Antonia, Calixta Comité y Mi socio Manolo, y otras que recrean la tradición sincrética cubana (en especial, la yoruba), como Obba y Chango, Obedí, el cazador, Ochún y las cotorras. Su teatro trascendió lo perecedero del escenario al llegar a la cinematografía nacional con parte de sus piezas teatrales.

Ostenta la Distinción por la Cultura Nacional y el Premio Nacional de Teatro entre los reconocimientos más importantes.

Ambos intelectuales han explorado en los intersticios de las diferentes dimensiones de la cultura nacional, desde sus escenarios de creación, al aportar una reafirmación a las raíces e identidad cubanas, y al mismo tiempo construir, fortalecer y enriquecer, a través de una visión diversa, los elementos sociales ideológicos y espirituales de cada cubano, incluso aunque nunca hayamos conocido sus obras.