Con el triunfo de la Revolución se instrumentaron políticas de equidad y justicia social que dignificasen al hombre, antes objeto de estrategias de explotación y discriminación social, profundas.

Las diferencias de clase, raza y credo, antes de 1959, se hacían sentir por doquier. Predominaban selectas y privadas escuelas, playas, centros recreativos, áreas de exclusividad para la oligarquía local y foránea que además mantenía en su poder los principales recursos e intereses del país.

Y si la nación caribeña no fuese objeto, desde hace más de 60 años, del criminal y más extenso bloqueo económico, comercial y financiero de la historia de América, mucho más podrían haber conquistado los cubanos en materia de derechos humanos.

Las campañas mediáticas aplicadas por Washington con sus transnacionales de la comunicación, redes y serviles mafias contrarrevolucionarias orientadas a divulgar noticias falsas, con fines desestabilizadores y prácticas subversivas contra el pueblo de Cuba han intentado durante décadas quebrantar la estabilidad del país con el propósito de imponer, nuevamente, el sistema de explotación, corrupción, prostitución, segregación racial y social de los años 50, del pasado siglo.

Además del injusto asedio a la Mayor de las Antillas, la Casa Blanca ante la repulsa mundial al bloqueo trata de buscar pretextos para sustentar el cerco, incluyendo a la Isla en una espuria lista de países patrocinadores del terrorismo. Ello resultó tan descabellado y carente de toda solidez en argumentos, que ni siquiera el todavía presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, y su ejército de agentes de inteligencia, creen.

Foto: Infografías ACN

Sin embargo, mantienen la hostilidad perenne contra La Habana por tozudez e intereses políticos, y no comprenden que sosteniendo más tiempo esa irracional postura siguen perdiendo credibilidad ante la comunidad internacional, en un tema tan sensible como la lucha contra el terrorismo.

Los cubanos han dado fehacientes ejemplos de combate a las prácticas de extremistas que instrumentan violencia, destrucción y vulneran derechos humanos. Washington, a diferencia, en su propio territorio ha atacado embajadas y dependencias cubanas con total impunidad por parte de ese gobierno. A ello se suma el dar cobijo durante años a connotados terroristas como Posada Carriles y Orlando Bosch, ambos fallecidos sin ser juzgados por sus crímenes de lesa humanidad.

Foto: Infografías ACN

A su vez, la Isla ofrece solidaridad, colaboración y ayuda a naciones necesitadas con médicos y maestros, mientras EE.UU, brinda efectivos militares, armas de destrucción masiva y tecnología de muerte, incluso, a quienes son juzgados por genocidio como el gobierno de Israel en su despiadado e inhumano accionar en Gaza. ¿Quién quebranta derechos humanos?

Así mismo este pueblo resiste la más abominable embestida de Norteamérica que país alguno en esta era de civilización, haya conocido. Y a pesar de la compleja situación económica, la crisis energética en que ha estado afectado el territorio, principalmente por los infames costos del bloqueo, su noble y generoso pueblo no ceja en su empeño de trabajar, estudiar y apostar al desarrollo, en las muy difíciles condiciones del contexto actual.

Foto: Cartel

Otras informaciones:

Debaten miembros de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana, en La Habana, informe a la VI Conferencia Provincial de la ACRC