Gracias a la visión de futuro del máximo líder de la Revolución Fidel Castro de impulsar la estrategia de Voluntad Hidráulica a lo largo y ancho del territorio se ha podido amortiguar, disminuir, durante estos años las consecuencias de los crecientes cambios climáticos que inciden en la ocurrencia, cada vez mayor, de tormentas y huracanes de gran intensidad.
Ante la precaria situación del sector hidráulico de la Isla durante la “era republicana”, donde apenas unos miles de habitantes de alrededor 114 asentamientos tenían suministro de agua por acueducto, 12 por alcantarillado y solo 16 áreas de cloración (lo cual se agravaba con lo insuficiente que resultaba el de La Habana que además precisaba de ser restructurado y reparado), se creó el 10 de agosto de 1962 el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos.
Desde entonces, este tuvo la misión de contrarrestar los efectos de la sequía y potenciar presas y micropresas para atesorar suficiente volumen de agua, y también orientar el empleo de este valioso recurso al desarrollo social y económico del país, beneficiando no solo asentamientos poblacionales, sino también los planes agrícolas, industriales y otros que requieren del uso del preciado líquido.
También el INRH contribuyó desde su inicio a potenciar un amplio proceso inversionista y constructivo logrando extender la otrora e insuficiente infraestructura hidráulica, así como la rehabilitación de redes de conducción y distribución del agua potable, y establecer obras para el saneamiento ambiental, logros alcanzados en estas más de seis décadas de Revolución.

La tragedia del ciclón Flora, entonces huracán categoría 2, acontecido en la nación caribeña en octubre de 1963 demostró una vez más la necesidad de transformar lo más rápido posible la situación heredada de los gobiernos de turno anteriores a 1959 que solo privilegiaban los intereses de la oligarquía en detrimento de la mayoría de la población.
De ahí que la idea de Fidel de desarrollar los recursos hidráulicos y trabajar en función de mitigar la sequía y además preparar a la población con una Defensa Civil eficaz, capaz de establecer medidas orientadas a preservar vidas humanas y minimizar daños con una evacuación oportuna, adecuada organización y disciplina social fue crucial e impostergable. Y sin dudas ello ha permitido salvar a millones de ciudadanos y evitar consecuencias más letales para el país.

Actualmente en la Mayor de las Antillas existe capacidad de almacenar agua superficial por más de 9 mil millones de metros cúbicos en unos 242 embalses, también se han construido sistemas de acueducto, más de 22 mil kilómetros de redes y unas 2 mil instalaciones para su potabilización. Y aún se sigue trabajando en perfeccionar y ampliar el sistema hidráulico beneficiando cada vez más, a un mayor número de pobladores.
El otrora presidente y fundador del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos Faustino Pérez Hernández tuvo un rol destacado en sus avances desde los inicios de los años 60, y de manera acertada entonces declaró: ”No hay desarrollo económico ni social posible sin desarrollo hidráulico”.
Y hasta nuestros días la tecnología aplicada para la construcción de embalses en todo el territorio es considerada efectiva por expertos del ramo los cuales mantienen una vigilancia sistemática sobre cada uno de los embalses y su comportamiento.
De igual manera, los ciudadanos han adquirido cultura sobre la protección y las medidas requeridas de aplicar ante cada fenómeno atmosférico y climatológico que nos azote.
Y como también expresan profesionales del Instituto Nacional de Meteorología, no pueden descuidarse ninguna de las disposiciones emitidas por los factores competentes o autoridades de la Defensa Civil, el aviso y dictamen de medidas oportunas son la única forma de protección ante cualquier fenómeno o embate climatológico, para luego pasar a la fase de recuperación y vencer cada reto que la caprichosa, a veces agresiva e impredecible Naturaleza, imponga al noble y heroico pueblo de Cuba.
Y en la calle 12 entre 13 y 15 no entra agua a todos los vecinos porque no abren completamente las válvulas. Después dicen por todos los medios que se abasteció Plaza tal día y no es así, es una pequeña parte de Plaza, dicen las verdades a medias, como siempre.