El mes de octubre que concluye será un mes de referencia histórica para todo el país, después de la contingencia energética que afectó la capacidad de generación eléctrica de las plantas conectadas al Sistema Electroenergético Nacional (SEN), debido a las consecuencias directas del bloqueo impuesto y sostenido por el gobierno de los Estados Unidos y las circunstancias meteorológicas determinadas por el cambio climático -con afectaciones directas sobre las vidas y recursos económicos- tras el paso del huracán Oscar por el oriente del archipiélago cubano.

Precisamente, en medio de la grave situación por el impacto del huracán Oscar, en Guantánamo, los enemigos de la Revolución cebaron sus misiles mediáticos con “ojivas de desinformación” que nos obligan a tomar en cuenta las experiencias vividas y protagonizadas por los principales dirigentes del Partido y el Gobierno en su odisea para atravesar caminos interrumpidos por deslaves y lluvias en función de orientar, dirigir y establecer el ordenamiento de las formas de suministro de recursos vitales a los residentes en localidades aisladas por las intensas lluvias y desbordes de afluentes subterráneos y de superficie.

Estremecedor y lleno de firmeza resultó el testimonio de la primera viceministra, Inés María Chapman Waugh, justo cuando presenciaba el impacto de falsas noticias en una de las localidades visitadas y la población agitada en busca de refugio frente a un supuesto colapso de las paredes de contención de un embalse sobre la montaña en San Antonio del Sur.

Su alta preparación como ingeniera hidráulica y liderazgo como dirigente, le permitió avanzar en dirección hacia el lugar donde se ubicaba el embalse, evaluar en el terreno las condiciones de seguridad y emitir pronósticos certeros sobre el comportamiento de esta obra ingeniera y orientar, por todos los medios posibles, incluso de persona a persona, la información que desmentía el vandálico acto criminal para crear pánico en una población sometida a un alto estrés y los traumas psicológicos que pueden generar el desconocimiento sobre el peligro real, en una situación meteorológica donde los medios tradicionales de comunicación no podían tener la efectividad lograda en otras circunstancias como denunció en su intervención televisiva.

El meteoro Oscar resultó un fenómeno diferente a todo lo conocido que incidió sobre una zona geográfica compleja en cuanto a la presencia de montañas, ríos subterráneos y superficiales, accesos de comunicación terrestre cuyas características obliga a mantener una observación constante como es el caso del viaducto de la Farola; condicionado el comportamiento de este evento por el cambio climático, todo lo cual nos deja duras enseñanzas y la impostergable necesidad de retomar los estudios orientados por el Comandante en Jefe, Fidel, específicamente para esta área del país.

La presencia del Primer Secretario del Comité Central y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez; del Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz; así como un amplio equipo de Gobierno, para evaluar de manera inmediata los principales daños y recorrer áreas de las comunidades más afectadas por el meteoro, posibilitó el intercambio directo con las poblaciones, transmitir orientaciones precisas y directas, establecer un intercambio sostenido en cuanto al proceso de recuperación y las medidas que deberán ser puestas en prácticas después de la experiencia vivida.

San Antonio del Sur, Imías, Maisí y Baracoa, acercaron estas geografías al epicentro del corazón de la nación, en cuanto a las preocupaciones de los residentes en los cuatro municipios más afectados. El pueblo de Cuba demostró su incondicionalidad al llamado de la máxima dirección del Partido y el Gobierno en la necesidad de mantenerse informados por las fuentes oficiales a través de alternativas como las redes sociales de la Internet y los radioaficionados.

La ayuda solidaria brotó espontánea de todas las provincias; contra corriente a la guerra mediática que se nos hace –a través de las plataformas ciberespaciales- y la certeza de que no son molinos de vientos, desde el exterior llegaron los mensajes de aliento y recursos materiales imprescindibles en estos casos.

Foto: Presidencia de la República

Desde la mañana de este domingo 3 de noviembre, el Grupo Temporal de Trabajo de La Habana, presidido por los miembros del Comité Central, Liván Izquierdo Alonso, primer secretario del Comité Provincial del Partido; y la Gobernadora de La Habana, Yanet Hernández Pérez, puntualizan el chequeo de la vitalidad de los servicios en todos los municipios de la capital y las acciones de prevención de daños ante la proximidad de un evento meteorológico, a partir de la alerta emitida por el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil y la posibilidad del deterioro de la situación climatológica.

Por esta razón se realizó un recorrido que incluyó como punto de partida la dirección de la empresa Aguas de La Habana, las zonas bajas del litoral habanero reconocidos por la penetración del mar y en horas del mediodía se evaluarán estas acciones en la sede del Gobierno de la capital.

La firmeza de nuestro pueblo está demostrada, la reciente votación a favor de Cuba contra el bloqueo en las Naciones Unidas dice mucho de la posición asumida de mantener la unidad para garantizar la soberanía y defender nuestra independencia frente a cualquier intento de tergiversar la realidad ante las muestras de resistencia frente al bloqueo sostenido por Washington. Se cumple, así, la sentencia martiana: “El mejor modo de hacerse servir, es hacerse respetar. Cuba no anda de pedigüeña por el mundo: anda de hermana, y obra con la autoridad de tal. Al salvarse, salva”.

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Se reúne Grupo Temporal de trabajo de La Habana