Mujeres de diferentes proyectos, cooperativas, colectivos y pequeños negocios participaron en el taller Emprender es poder: ellas cuentan, organizado a propósito del Día Internacional de la Mujer, con sede en el Pabellón Cuba.
Convocado por el Centro Oscar Arnulfo Romero (OAR) forma parte de un proyecto con la ONG Internacionalisme, Solidaritat, Feminismes (Suds), con financiamiento del Ayuntamiento de Barcelona, para fortalecer el empoderamiento económico femenino.
Según explicó Zulema Hidalgo, de OAR, el evento agrupó a iniciativas diversas, que pueden haber enfrentado obstáculos similares u otros, para construir saberes, a partir de compartir las limitaciones que han atravesado, a las que se suman algunas problemáticas de género en el contexto del país y al interior de esos emprendimientos.
Los objetivos del encuentro, destacó la profesora Mirell Pérez, fueron socializar buenas prácticas de emprendimientos desarrollados por mujeres en sus procesos, estrategias, resultados y lecciones aprendidas, y analizar los factores de contexto y familiares que facilitan y/o entorpecen el empoderamiento femenino.
A su vez, este taller se propuso promover el intercambio entre mujeres, respecto a problemáticas de género con vista a compartir estrategias que potencien sus habilidades o cualidades para toma de decisiones y emprender.
Para la profesora e investigadora Magela Romero, quien facilitó el intercambio, la cita se propuso contribuir a la comprensión de que “no basta con tener un emprendimiento de mujeres para garantizar estrategias de género y que potencien la equidad de género…sino que es necesario intencionar la participación equitativa en la toma de decisiones, en los beneficios, en el acceso a los recursos, en el liderazgo”.
Al respeto, alertó que “también entre mujeres se pueden dar relaciones de poder que reproducen patrones géneros tradicionales y que marcan las relaciones entre ellas”.
Para la estudiosa, no basta con la autonomía económica, sino que pasa también por el empoderamiento real, en el desarrollo de sus planes personales y profesionales y su realización, por lo que es necesario que repiensen sus prácticas sobre qué hacen con ese poder, esa economía para su autocuidado, sus aspiraciones y su bienestar.
Iniciativas diversas
Del entramado de nuevos actores que operan hoy en el contexto económico cubano, cuatro iniciativas expusieron sus trayectorias y propósitos.
Según Hidalgo, cuatro de ellas abundaron en las motivaciones para su creación, sus objetivos, caminos y campo de acción: Marié, marca de ropa y atelier, que ha transitado un tránsito complejo para llegar a tener un local en arrendamiento; Mujeres en Espiral, un proyecto que abarca unas 16 iniciativas en diferentes municipios y resultantes de proyectos para impulsar el emprendimiento femenino; la cooperativa Dajo, un servicio de lavandería y confecciones, y la primera marca cubana de ropa afro BarbarA´s.

En el evento, divididos en grupos, se analizaron las problemáticas de género que limitan a las mujeres, el impacto de la desigual distribución del trabajo de cuidados entre ellas y los hombres, así como obstáculos, incluidos el patriarcado, los estereotipos machistas, la sobrecarga doméstica, falta de confianza, baja autoestima, desconocimiento en temas económicos y jurídicos, falta de apoyo familiar y de capacitación de quienes toman las decisiones, entre otros.
El encuentro también contó con la presencia de representantes de centros de investigación, entre ellos, el Centro de Estudios de la Economía Cubana (CEEC). Consuelo Ameneiro, de esta institución, halló en el encuentro valiosos elementos comunes: tener conciencia de sus fortalezas y saber identificar las oportunidades que da el entorno.
“Todas estas cosas que nos han presentado hoy, están asociadas a capacidades personales de quienes han emprendido, lo que sabían hacer, lo que era su sueño, lo que les hubiera gustado, les llamaba la atención, lo que les motivó…y han sabido encontrar en medio de ese entorno, con cosas buenas y cosas malas, adversidades y facilidades, su lugar”.
A juicio de Ameneiro, el éxito radica precisamente en tener conciencia de “cuál es mi propuesta de valor, que es lo que sé, que puedo hacer” y eso se logra en los emprendimientos como estos.
Proyecto para empoderar a las mujeres
De acuerdo con Eva Fernández, coordinadora de proyecto de Suds, el taller forma parte del cierre del proyecto para el empoderamiento económico y social de las mujeres y cómo ha contribuido a disminuir las brechas y la violencia de género.
“Fue un proyecto difícil porque se dio en tiempos de pandemia y fue un reto trabajar, en la selección, formación y acompañamiento a mujeres para sus emprendimientos, que las llevó a utilizar Whatsapp, ir a los Talleres de Transformación Integral del Barrio, mantener la distancia de seguridad, con un gran esfuerzo de OAR”, destacó.
Según valoró, el proyecto ha tenido un gran impacto y el intercambio ha sido enriquecedor entre muchas experiencias de mujeres emprendedoras, algunas con muchísimos resultados y otras que están empezando y para ellas es importante escuchar las vivencias de quienes ya transitaron el camino.
“Me ha sorprendido mucho el nivel de reflexión y el debate…el proyecto les ha dado, sobre todo, herramientas de conocimientos y lo más importante es que son mujeres empoderadas que están trabajando por salir adelante en este contexto adverso, no solo en Cuba, sino internacional, pero estas mujeres no le temen a los obstáculos”, comentó.

Otras informaciones:
Buena acogida de unidades comerciales con precios competitivos

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